sábado, 30 de octubre de 2010

2+2=5

¿Qué es un Teco? ¿Cómo podría definirse a un Teco más allá del simple hecho de que fue reclutado y llevado hasta el paroxismo de la locura del fanatismo antisemita dentro de una sociedad secreta creada por un megalómano paranoico llamado Antonio Leaño Alvarez del Castillo -hoy cadáver más no así el engendro sociópata que creó- que quería controlar no sólo todo lo que sucede dentro de la Universidad Autónoma de Guadalajara sino que inclusive ambicionaba con extender todo su siniestro poderío sobre el Estado de Jalisco y sobre el resto de México a través de las legiones de seguidores suyos que estuvo graduando por décadas (algo que, afortunadamente, no le tocó ver materializado en vida aunque sí vivió para constatar los enormes alcances de la conjura nacional que puso en marcha)?

Al igual que los Nazis de la Alemania Hitleriana, al igual que los musulmanes fundamentalistas del Talibán en Afganistán, un Teco es un tipo que ha caído en el fondo de la irracionalidad, y que ya no puede caer más bajo. Sólo cree en lo que quiere creer. Sólo vé lo que quiere ver. Sólo escucha lo que quiere escuchar. De nada sirve presentarle documentos históricos y testimonios contrarios a lo que él supone como cierto, porque no les dará entrada en su desequilibrado cerebro pese a la solidez con la que puedan estar fundamentados. Representa, ni más ni menos, la irracionalidad de los tres changuitos:





que, encerrados en su propio mundo de fantasías locas, se resisten a procesar a través de sus sentidos información alguna que sea contraria a lo que ellos se les ha hecho creer.

El Teco no siempre fue Teco. Ciertamente, no nació siendo un Teco cuando su mente estaba vacía en espera de ser llenada por otros ya sea con información buena o con información mala. Nadie nace siendo Teco. La persona es transformada en Teco mediante un proceso gradual y hasta cierto punto tardado, pero los propagandistas que llevan a cabo el lavado de cerebro son pacientes y se pueden tomar su tiempo, porque el fruto de esa labor paciente de indoctrinación y fanatización a la larga se verá recompensada en la mayoría de los casos con la disponibilidad de gente que estará dispuesta a hacer todo, absolutamente todo por ellos, desde incurrir en crímenes brutales que cualquier cristiano decente en su sano juicio jamás se atrevería a concebir siquiera, hasta dar la vida por ellos. Es, en cierta forma, un esclavo que les dará su libertad y les entregará su conciencia esencialmente a cambio de nada, literalmente hablando.

Cuando a un niño de Primaria se le presenta por vez primera la operación aritmética:

2 + 2 = 4

llevándolo de la mano hacia el dominio de una de las funciones mentales más poderosas del hombre, la abstracción simbólica, el niño ve y constata que esta abstracción representa realidades con las que no se puede discutir, porque la lógica, aplicada correctamente, nos lleva a ver lo que es tal como es, sin distorsiones, sin interpretaciones distintas que estén en desacuerdo con lo que es. Si juntamos dos manzanas con otras dos manzanas, entonces tendremos cuatro manzanas, de eso nunca podrá haber absolutamente duda alguna. Si tenemos dos pesos en un bolsillo y tenemos otros dos pesos en el otro bolsillo, entonces tendremos cuatro pesos en ambos bolsillos, de esto tampoco podrá haber jamás duda alguna. Más adelante, al aprender las tablas de multiplicar, a menos de que el niño no cometa equivocación alguna en sus operaciones aritméticas obtendrá en su manejo de cantidades mayores respuestas que serán diferentes de las respuestas que le dá el maestro y que le impedirán obtener la codiciada calificación de diez. Y eventualmente buscará y buscará hasta encontrar por sí mismo o con la ayuda de otros el punto exacto en sus procedimientos en el cual se equivocó, ya sea un signo aritmético o una operación mal llevada a cabo, o inclusive un error de razonamiento. Y al descubrir su error, y sobre todo, al reconocerlo, el niño dará un gran paso hacia adelante, porque el hombre aprende más de sus errores que de las cosas en las que no comete error alguno. En la aritmética, esto es lo que sucede, porque la primera regla dorada es que un mismo problema aritmético no puede tener dos soluciones distintas. Si dos personas obtienen dos soluciones distintas a un mismo problema, entonces por lo menos una de ellas está equivocada, lo cual no quita que la otra también pueda estarlo y que ambas estén en el error. Por ello es importante la labor del Maestro que con mano firme y segura los puede sacar de su error corrigiéndolos y perfeccionándolos de este modo en su formación intelectual. Estamos hablando, desde luego, de un buen Maestro, de un verdadero Maestro en toda la extensión de la palabra, quien sin esperar obtener a la larga algo del niño y sin buscar lucro o interés propio alguno lo guía y lo endereza con el fin de ayudarlo a ser mejor y superarse día tras día.

En contraste, los que indoctrinan y reclutan a los Tecos así como quienes indoctrinan y reclutan a sus militantes Yunques dentro de sus nefastas sociedades jamás llevan a sus “iluminados” por el sendero correcto, y siempre están a la espera de ver retribuído el tiempo que están inviertiendo en fanatizar e indoctrinar a sus “escogidos” para poder sacarles el máximo jugo posible cuando se presente la ocasión. Todas sus enseñanzas siempre llevan un doble propósito, lo cual naturalmente jamás se lo dicen al que está cayendo en la trampa. Toda su propaganda está estructurada no con la verdad, sino con la mentira, o peor aún, con un revuelto magistral de verdades y mentiras para hacerle difícil al aprendiz el poder distinguir lo verdadero de lo falso. Esto es lo que han hecho propagandistas como Salvador Borrego, Traian Romanescu y Joaquín Bochaca. Construír esta propaganda mendaz no es cosa fácil, y se requiere una enorme inversión de tiempo y dinero para elaborarla, aunque por lo general esta clase de propagandistas casi siempre están respaldados por grupos fuertes y poderosos que consideran el financiamiento de toda esta basura como una inversión a largo plazo que les será favorable a sus propios intereses, algo así como el comerciante que primero tiene que hacerse de un buen inventario de mercancía antes de poder ser comerciante, porque para poder ser comerciante primero hay que tener algo que vender. Del mismo modo, los organizadores de estos semilleros de fanatismo desbocado en realidad están viendo por ellos mismos y por sus propios intereses, nunca por el bien de aquellos a los que están desequilibrando mentalmente.

Y una vez que se ha llevado a finalizado el proceso de inducción de un individuo metiéndole en la cabeza ideas y cosas que chocan en contra de la lógica y de la razón, convirtiéndolo en Teco, una vez que el proceso ha sido concluído, en realidad ya no hay nada que se pueda hacer por el infortunado sujeto. Se ha perdido a sí mismo, por abrirle su mente a gente en la que no se debe confiar jamás y por haber permitido que le llenaran el cerebro de información y materia que, en esencia, no es más que basura.

Se le puede señalar a un Teco los lugares exactos dentro de la propaganda en donde se le ha mentido. Pero ello no servirá de nada, porque su cerebro ya no está dispuesto a procesar la información correctora. Se le puede decir: “mira, en la página X del libro Y se afirma tal y cual cosa sobre algo que supuestamente ocurrió en tal fecha; pero en el sitio en donde tal cosa supuestamente ocurrió y en la fecha en la que supuestamente ocurrió no existe constancia histórica alguna de que efectivamente haya sucedido, entonces si el autor no puede comprobar su dicho anexando el material histórico que afirma haber descubierto se debe suponer que ha incurrido en una mentira”. Pero al Teco no le importará que se le haya señalado una mentira que él puede cotejar por sí mismo consultando otras fuentes históricas. De hecho, si en cualquiera de los libros con los que fue fanatizado, se le indican no una sino muchas mentiras con las cuales fue construído mañosamente el libro, tampoco esto hará cambiar de ideas al Teco, porque él ya solo verá lo que su enceguecido cerebro le permite ver. Ha perdido por completo su capacidad de raciocinio. Y en lugar de esa maravillosa capacidad de raciocionio con la que los seres humanos llegan al mundo, lo único que hay es un pozo negro de fundamentalismo, intolerancia, vanidad y soberbia. Si se le dice : “mira, te recomiendo que compres un boleto de avión para que vayas en persona a tal sitio en Europa y para que hables con los habitantes de tal y cual poblado para que ellos mismos te confirmen por sus propias bocas lo que verdaderamente sucedió”, lo más seguro es que el Teco radicalizado jamás hará tal cosa, porque nunca hará nada que lo pueda hacer dudar de la indoctrinación ideológica con la que ha sido moldeado. En cierta forma, como un demonio alojado dentro de su propio cerebro, el gusano insidioso que se le metió por un oído y desafortunadamente no se le salió por el otro se resiste a ser expulsado del individuo. Es como si hubiese un ente extraño alojado en el sub-consciente del individuo que se resiste a ser echado fuera, que se resiste a morir, y en su desesperada lucha por mantener su control sobre el individuo lo primero que le sacrifica es su capacidad de raciocinio. Sacrificada la capacidad de raciocinio dentro del individuo en el curso de esta guerra interna, la guerra más terrible de todas, lo más probable es que ganará el demonio que le fué incrustado en su cerebro por gente mala, lo más seguro es que ganará ese Satán que tiene alojado en lo más recóndito de sus neuronas, porque una vez que un Satán de este calibre ha entrado en la mente de una persona al haberle abierto la misma persona las puertas de su entendimiento y de su intelecto, expulsarlo se convierte en una labor de titanes con muy pocas probabilidades de éxito. Y aún suponiendo que un Teco pueda ser confrontado directamente con ayuda especializada, se corre el riesgo de que el Teco, al darse cuenta del engaño, al darse cuenta de que le tomaron el pelo, al descubrir que quienes lo reclutaron y lo indoctrinaron le vieron la cara de un perfecto idiota, optará por el suicidio antes que resignarse a aceptar en definitiva la pérdida de aquello que se había convertido en la única razón de su existencia, su única razón de ser, su vida entera. Este choque interno en la psique de la persona, aunque terapéutico, irónicamente puede ser la causa de que la persona termine poniendo fin a su propia existencia. Con lo que a fin de cuentas el Satán que tiene alojado dentro en su mente termina ganando la batalla.

¿Qué es, pues, un Teco?

Es una persona a la que, en contraposición directa a la lógica, a la razón, y al buen entendimiento, de alguna manera se ha logrado meterle en la cabeza una ideología tan absurda como la idea de que:

2 + 2 = 5

y, con una ideología tan irracional, tan absurda, tan llena de intolerancia, radicalismo, fundamentalismo y odio visceral, con un modo de pensar que le hace creer a la persona en sus adentros que “todos los demás que no piensan como yo están en el error, están equivocados, porque yo sí tengo la Verdad en mis manos y esa verdad es una verdad absoluta, sin márgenes de error o equivocación”, es imposible tratar de hacer entrar a esa persona en razón alguna, porque en última instancia nadie más podrá sacar a esa persona del atolladero más que ella misma. De nada servirá llegar ante esa persona con los mejores intelectos del planeta para que le puedan rebatir uno a uno sus puntos de contención y sus “verdades”, de nada servirá usar con esa persona la más pura lógica Aristotélica y recurrir a lo más formal que pueda haber en toda la lógica Kantiana, de nada servirá que esa persona pueda tener acceso total a las mejores bibliotecas de la Tierra, y de nada servirá que esa persona pueda tener acceso libre y gratuito a Internet, porque a fin de cuentas, esa persona al igual que los tres changuitos sólo será capaz de poder escuchar y ver lo que quiere escuchar y ver, cerrándose como una concha de tortuga o como un avestruz a cualquier otra cosa que no esté en pleno de acuerdo con su modo de pensar.

A estos tipos no se les puede ganar en nada; es imposible, porque tienen que ganar en todo lo que piensan y en todo lo que dicen al igual que como ocurría con el Nazismo alemán. En relación a esto y en ocasión de la inmensa popularidad de que goza el futbol soccer en México, es menester recordar un célebre partido de futbol que se llevó a cabo durante la Segunda Guerra Mundial, del cual tenemos como testimonio gráfico la siguiente fotografía:





El famoso partido vendría siendo conocido en la actualidad como el “Partido de la Muerte”, celebrado en el año 1941, luego de que los nazis tomaron la ciudad de Kiev, en Ucrania. Un equipo alemán se enfrentó contra un equipo ucraniano, llamado F. C. Start (Football Club Start) integrado por panaderos a quiénes se les advirtió que debían perder el encuentro bajo amenaza de muerte. Como tantas cosas inexplicables, estos hombres decidieron jugar haciendo caso omiso a la amenaza. El partido terminó 5 a 3 a favor de los panaderos. La historia terminó con 14 muertos sobre los 16 jugadores del plantel. En la actualidad hay un monumento en la ciudad de Kiev en homenaje a estas víctimas.

El “buen” Teco tiene sus facultades superiores de discernimiento y razonamiento lógico tan atrofiadas que inclusive se aferrará a ideas que puedan ir en contra del más elemental sentido común al igual que como ocurrió con el fascismo español pro-Hitleriano en los tiempos de Francisco Franco. Un ejemplo de esta carencia casi total de juicio lógico legada por el Franquismo a los Tecos a través de sus contactos en Guadalajara es la creencia de que las personas simpatizantes del comunismo son biológicamente inferiores al tener supuestamente ¡un gen que los predispone a ser marxistas! Es así como al Comandante y pseudo-psiquiatra fascista Antonio Vallejo-Nájera (1889-1960), jefe de los Servicios Psiquiátricos Militares de la dictadura franquista y una de las figuras clave de la represión franquista en la postguerra porque la revistió de un manto pseudo-científico:





le fue encargado un estudio que demostrase la inferioridad mental de personas de ideología marxista. Según Eduard Pons Prades en su obra Los niños republicanos (editado en RBA, 2005):





El 23 de agosto de 1938 Franco autorizó la creación del Gabinete de Investigaciones Psicológicas, cuya finalidad era “investigar las raíces biopsíquicas del marxismo”, tal y como le había demandado Vallejo Nájera, tras lo cual Vallejo-Nájera dirigió, en 1938, un estudio sobre los prisioneros de guerra republicanos, para determinar qué malformación llevaba al marxismo. O sea: iba en busca del “gen rojo”. Para llevar a cabo el “estudio”, se utilizaron dos grupos: uno de prisioneros capturados que eran miembros de las Brigadas Internacionales y otro compuesto por 50 presas malagueñas. Algunas de las “conclusiones” del estudio realizado por Vallejo-Nájera son las siguientes:

“La idea de las íntimas relaciones entre marxismo e inferioridad mental ya la habíamos expuesto anteriormente en otros trabajos. La comprobación de nuestras hipótesis tiene enorme trascendencia político social, pues si militan en el marxismo de preferencia psicópatas antisociales, como es nuestra idea, la segregación de estos sujetos desde la infancia, podría liberar a la sociedad de plaga tan terrible”. (Los alucinados con la literatura antisemita de la ultraderecha son incapaces de verse a sí mismos en un espejo y considerar la posibilidad de que el ultraderechismo ciego pueda producir psicópatas antisociales, como ellos mismos, y por lo tanto según ellos tipos como Hitler, Himmler, Franco, Mengele, y otros del mismo estilo no pueden ser psicópatas antisociales y por el contrario son “seres incomprendidos”.
Sobre la inferioridad mental de los partidarios de la igualdad social y política o desafectos: “La perversidad de los regímenes democráticos favorecedores del resentimiento promociona a los fracasados sociales con políticas públicas, a diferencia de lo que sucede con los regímenes aristocráticos donde sólo triunfan socialmente los hijos de los más ricos predestinados desde las cunas mejores”. (Se repite y se seguirá repitiendo aquí hasta el cansancio que todos los regímenes emanados de la ultraderecha son y siempre han sido enemigos declarados de la democracia, como en su tiempo lo fueron los dictadores fascistas Adolfo Hitler, Francisco Franco y Augusto Pinochet).
“El imbécil social incluye a esa multitud de seres incultos, torpes, sugestionables, carentes de espontaneidad e iniciativa, que contribuyen a formar parte de la masa gregaria de las gentes anónimas”.

Además de concluír que las opciones políticas de los individuos están asentadas sobre bases biológicas (¿?), los “descubrimientos” de Vallejo-Nájera contribuyeron a fomentar en la España Franquista la idea de la inferioridad de las mujeres:

“A la mujer se le atrofia la inteligencia como las alas a las mariposas de la isla de Kerguelen, ya que su misión en el mundo no es la de luchar en la vida, sino acunar la descendencia de quien tiene que luchar por ella.”

Si los españoles adoradores del Franquismo fascista creyeron y siguen creyendo al igual que Francisco Franco y los miembros de la Falange en la inferioridad de las mujeres, entonces han de haber olvidado que todos ellos tuvieron una madre que los trajo al mundo; inferior, desde luego, al igual que ellos. Otras de las conclusiones de Vallejo-Nájera son:

“La raza es espíritu. España es espíritu. La Hispanidad es espíritu...
Por eso hemos de impregnarnos de Hispanidad... para comprender nuestras esencias raciales y diferenciar nuestra raza de las extrañas.”

Este espíritu lo definía como “militarismo social, que quiere decir orden, disciplina, sacrificio personal, puntualidad en el servicio, porque la redoma militar encierra esencias puras de virtudes sociales, fortaleza corporal y espiritual”. Y para mejorar la raza era necesaria "la militarización de la escuela, de la Universidad, del taller, del café, del teatro, de todos los ámbitos sociales". Su purificación de la raza incluía el resurgimiento de la Santa Inquisición en contra de las personas que consideraba antipatrióticas, anticatólicas y antimilitares que corrompían la raza española. Afirmó además que:

“La parte del problema racial de España era que había demasiados Sanchos Panzas (físico redondeado, ventrudo, sensual y arribista), y pocos Don Quijotes (casto, austero, sobrio e idealista), personajes imbuidos en un militarismo, identificando la cultura militar como la la máxima expresión de raza superior.” (Quien tenga dudas de que en su quintaesencia el Franquismo era idéntico en sus teorías de superioridad racial a las mismas ideas que pregonaban los Nazis alemanes, debería poner atención a esto.)

Toda la bibliografía más de corte más político que científico y todas las pseudo-investigaciones de Antonio Vallejo-Nájera estaban encaminadas a demostrar que “el marxismo es una enfermedad mental” (¿?), que existe un gen rojo que hace enfermar a las personas y que “lo mejor es que los rojos no tengan hijos” o, si los tienen, se les separe de sus padres, según explica la periodista y documentalista catalana Montse Armengou. ¿Y el Nazismo no era una enfermedad mental? ¿Y el fascismo Franquista no era otra enfermedad mental? ¿Y el Ku Klux Klan norteamericano, símbolo emblemático de los mismos grupos supremacistas raciales norteamericanos cuyos antepasados esclavizaron a los negros, tampoco era otra enfermedad mental?

En la actualidad, las torcidas conclusiones pseudo-científicas de Antonio Vallejo-Nájera sólo son capaces de causar risa o lástima en las comunidades académicas de hoy, aunque en su tiempo y en su momento Francisco Franco y sus incondicionales las tenían en alta estima y eran la “verdad oficial” del Estado. Entendiblemente, este psiquiatra fascista español de línea dura nunca fue nominado para recibir el Premio Nóbel de Medicina, algo que posiblemente sí habría sucedido si Hitler hubiese ganado la guerra.

El “buen” Teco no tarda mucho en aprender que es muy peligroso que insista en pensar por cuenta propia llegando a sus propias conclusiones y convicciones. Sólo le está permitido pensar lo que desde arriba le digan que piense, cualquier otra cosa es considerada como una traición que puede ameritar el castigo que suelen aplicarle al traidor. Tiene que dejar que otros piensen por él. Otros que, desde luego, viven mucho mejor que él, como lo fue el caso del mismo Gran Capo Antonio Leaño Alvarez del Castillo que seguramente en su intimidad se carcajeaba de que hubieran tantos idiotas dispuestos a creerle todo y dispuestos a morir por él.

Al “buen” Teco si le dicen: “Mira, Cantinflas era un judío. Se casó en 1934 con la judía rusa Valentina Ivanova Rosenberg a la cual Stalin le concedió un permiso especial para emigrar de Moscú con la finalidad de establecer junto con Cantinflas una base de operaciones en México para ganarle simpatizantes y adeptos al marxismo-leninismo en el mundo de habla hispana y poder servir ambos como espías para la Unión Soviética”, lo tiene que creer de inmediato en cuanto se lo dicen si los que se lo dicen son sus superiores. Porque, si se lo aseguran sus superiores, o si lo escribió un “historiador” como Salvador Borrego Escalante o como Traian Romanescu, entonces ha de ser cierto y no hay necesidad de ponerlo en tela de duda e investigarlo más a fondo. ¿Verdad? A él no lo engañarían sus superiores, ¿verdad? Él que ha confiado en ellos comprometiéndose a pelear hasta la muerte dando su vida por ellos, a él no lo engañarían, ¿verdad que no? Y así, les cree todo, absolutamente todo, al igual que muchos alemanes le creyeron a Hitler todo lo que les decía considerándolo casi casi como una encarnación de Salomón (bueno, Salomón no, porque aunque era muy sabio, era un judío; tal vez Aristóteles), como fuente de máxima autoridad a la que no se le cuestiona nada. Y si sus superiores le dicen que se arroje por una ventana desde el último piso de un edificio de veinte pisos, es muy posible que lo haga, porque si ellos se lo ordenan ha de ser por algo que valga la pena, ¿no es así?

Naturalmente, todas las cualidades que forman parte de la personalidad y el carácter del “buen” Teco le han sido pasadas y le están siendo pasadas a todos los alucinados que están afiliados a la ultraderechista Organización Nacional del Yunque, creada a fin de cuentas a semejanza de los mismos Tecos porque ellos mismos fueron los que la crearon. Y si estas organizaciones le piden obediencia total y ciega a superiores y jefes sin rostro, pues hay que hacerlo, y si tienen puesta en marcha una conjura nacional para el establecimiento de un gobierno paralelo secreto en México dominado desde las tinieblas por esos líderes sin rostro, pues hay que ser parte de la maquinaria conspiratoria porque ser uno de los engranajes es un honor. ¿No es así?

Un Teco, en resumidas cuentas, es una persona que le ha vendido su alma al Diablo. Y tal vez, lo peor del caso, es que le ha vendido su alma a cambio de nada, ni siquiera a cambio de los favores que obtuvo el Doctor Fausto de Mefistófeles. Y esa mala transacción tal vez sea la peor de las pifias en el sendero “luminoso” de la conversión de una persona común y corriente hacia lo que se espera de todo aquél que se considere a sí mismo como un “buen” Teco en toda la extensión de la palabra.

jueves, 28 de octubre de 2010

El camino “correcto”

A estas alturas, el mundo entero ya se ha dado cuenta de que México, co-gobernado por la dupla derecha-ultraderecha, co-gobernado por la infernal dupla PAN-Yunque, va camino directo hacia el despeñadero por la vía del fast-track.

Desafortunadamente, el hombre vanidoso y soberbio que arrojó a toda una Nación al marasmo con su guerra de legitimación para lograr con acciones espectaculares de poder la legitimidad y credibilidad que no pudo obtener en las urnas en las elecciones presidenciales del 2006, obstinado y testarudo se rehusa con toda la tosudez del mundo a admitir su error, aunque su terquedad esté traduciéndose en millares de muertos que se siguen sumando a los que ya lleva acumulados su más que nefasto gobierno. Nadie, ni siquiera su propia esposa, lo puede sacar de su cerrazón en la que insiste con la convicción propia de un fundamentalista Talibán en que México va por el camino correcto.

¿El camino correcto?

Veamos lo que nos tiene que decir el siguiente analista:

Drogas, estrategias encontradas
José A. Crespo
20 de marzo del 2010

No debiera sorprender a los estadounidenses que la narcoviolencia mexicana haya alcanzado a sus funcionarios consulares. Es imposible llevar a cabo un esquema de confrontación armada contra los cárteles, y pretender que eso no va a generar violencia en escaladas cada vez mayores. ¿Deben considerarse los asesinatos a diplomáticos de Estados Unidos como una señal más de que la guerra contra los capos se va ganando o debe verse como indicio de que las cosas se van saliendo cada vez más de control? Por la reacción de los estadounidenses, parece más lo segundo que lo primero. Hay que recordar, en todo caso, que así como los de Estados Unidos torcieron el brazo de Vicente Fox para que no sacara al Ejército de esta guerra (como era la intención original del guanajuatense), tuvieron mucho que ver en la profundización del conflicto al inicio de este gobierno: hubo una propuesta en ese sentido, planteada por los funcionarios de la DEA Karen Tandy y David Gaddis, a Eduardo Medina-Mora y a Genaro García Luna, en octubre de 2006 (El Universal, 26/I/10).

En Japón, Calderón se ufanó de los resultados arrojados por su estrategia: “Hay muchos muertos porque la estrategia es correcta y los muertos, casi todos… son de las bandas de los cárteles. Luego entonces vamos ganando la guerra” (1/II/10). Pero, a horas de eso, tuvo lugar el asesinato de 15 jóvenes en Ciudad Juárez, y entonces a Felipe no le quedó más remedio que mover su mira a Estados Unidos, como responsable último de este fenómeno: “Ese consumidor de drogas más grande del mundo no tiene el menor empacho… en vender hacia nuestro país todas las armas que puede... Se necesita, por un lado, parar el tráfico de armas hacia mi país… y reducir el consumo de drogas en Estados Unidos, vecino de esta ciudad” (3/II/10). Pero lo que destaca Calderón como requisitos para que su estrategia tenga éxito –reducción del consumo de drogas en Estados Unidos, y control de la venta ilícita de armas– simple y sencillamente no va a suceder. Si son esas las condiciones indispensables para ganar esta guerra, entonces podemos darla por perdida. Por ejemplo, según el Buró de Alcohol, Tabaco y Armas de Fuego de Estados Unidos, han entrado a México, en los últimos tres años, aproximadamente 900 mil armas. En contraparte, según autoridades mexicanas, durante este gobierno se han decomisado 30 mil armas, es decir, apenas 3 por ciento del total de armas ilegales que ha entrado en el mismo lapso. Y los legisladores de allá han dicho de todas las formas que no habrá una regulación más restrictiva, porque eso afectaría grandes intereses económicos del país.

Muchos en México y Estados Unidos pensamos que los costos de combatir la oferta de drogas con violencia tienden a superar los que genera el consumo. La DEA utiliza desde hace décadas un ejemplo para justificar la prohibición y el combate abierto a las drogas: pregunta a quién le gustaría tener como vecinos del barrio a algunos adictos. A nadie, supongo, pero resulta peor y más riesgoso que en ese barrio vivan los que producen y trafican las drogas. Es mucho más peligroso. El primer ejemplo se aplica más a Estados Unidos (mucho consumo de drogas con poca narcoviolencia), mientras que el segundo caso es más aplicable a México (poco consumo relativo de drogas, con mucha violencia producto del combate armado a los cárteles).

Y precisamente porque es peor pelear con traficantes que convivir con adictos, Estados Unidos ha elegido una estrategia de no confrontación con los capos de allá (los productores y distribuidores de diversos tipos de droga), aunque el consumo siga siendo el mayor del mundo. Si como dice nuestra canciller, Patricia Espinosa, es indispensable que Estados Unidos combata a sus narcos, nos quedaremos esperando (mientras crece nuestra espiral de violencia). Nunca lo van a hacer: aprendieron bien la lección de la guerra contra el alcohol. Más aún, van en sentido contrario, pues avanza la despenalización de la mariguana por motivos terapéuticos, pero también se explora ya en California su legalización para fines recreativos. Es decir, México y Estados Unidos aplican estrategias distintas, incluso encontradas.

Ha dicho Fernando Gómez Mont que “las sociedades de México y Estados Unidos están pagando un precio muy alto en términos económicos y de vidas humanas por el tráfico y consumo de drogas” (17/III/10). Sí, claro, pero, ¿es el mismo costo? ¿Cuál de los dos esquemas es menos dañino para la población? ¿Mucho consumo con poca violencia (Estados Unidos) o poco consumo con mucha violencia (México)?

Y en respuesta a uno de tantos pronunciamientos de Felipe Calderón, este publicado en LA JORNADA el martes 26 de octubre del 2010, afirmando de nueva cuenta como disco rayado que en relación a su guerra de legitimación en contra de la delincuencia organizada “vamos por el camino correcto”, un comentarista norteño de nombre José Ignacio Gallardo Baquier de la vapuleada ciudad fronteriza de Ciudad Juárez, una ciudad en vías de extinción, dijo al día siguiente: “¿En verdad vamos por el camino correcto? Cuando escucho hablar al presidente de México de que la estrategia implantada por su gobierno para combatir al crimen organizado va en el rumbo correcto no puedo más que preguntarme a cuál camino se refiere. Si el camino es la devastación de nuestra querida ciudad, si el rumbo es provocar el colapso de esta otrora pujante comunidad, sí, coincido con el Presidente, vamos precisamente en el camino correcto. Pero si lo que se pretendía era restablecer la paz social, la armonía entre los ciudadanos y el dinamismo de nuestra querida Ciudad Juárez, definitivamente no, no podemos hablar de que vamos avanzando en la resolución de los grandes problemas que enfrentamos desde hace casi tres años en esta frontera. Es más, parece que ni siquiera se ha empezado por conocer en su totalidad todos los factores que están generando la inédita crisis que en estos momentos atravesamos. Este fallido intento de rescate encabezado por las tres instancias de gobierno se inició sin todavía saber cómo se va a terminar. Las cifras son frías y muy evidentes, y tal vez en este caso nos den claridad sobre la penumbra en la que nos encontramos. En el 2007 se registraron poco más de 300 ejecuciones en esta frontera, cuando se inicia el Operativo Conjunto Chihuahua en el 2008 la cifra de ejecutados se elevó por encima de los 1600, el año 2009 cerró con más de 2600 muertes, para finales de este mes de octubre se estará rebasando el cierre del año pasado, lo que nos indica que con toda seguridad 2010 cerrará siendo el año más violento para mi querida Juárez, en lo que va del sexenio calderonista y en su historia reciente. Cuando se solicita la intervención del gobierno federal ante el fracaso de las instancias municipal y estatal y ante lo delicado de la situación, se pensaba que con su llegada entraríamos en una pronunciada disminución de la violencia que se desbordaba en las calles; sin embargo. los meses y los años han pasado y de manera alarmante vemos el efecto contrario al esperado. Las muertes se han multiplicado exponencialmente, las ejecuciones se han vuelto cada día más innecesariamente despiadadas y más estúpidamente crueles. El éxodo de juarenses es ya incuantificable al igual que las millonarias pérdidas del empresariado local. Locales vacíos, comercios incendiados, pánico y estrés colectivo, depresión generalizada, marchas de ciudadanos encolerizados, pero el gobierno federal insiste en su discurso triunfalista, de que vamos en el rumbo correcto. Una cascada de perturbantes hechos tiene presa a esta región; apenas estábamos comentando el apoyo ciudadano a la marcha encabezada por la comunidad de médicos en donde manifestaron su hartazgo por la situación que los tiene contra la pared, cuando nos despertamos el sábado con una nueva masacre, ahora en Horizontes del Sur. Muchos no pueden creer que de nuevo el infierno se haga presente ante una población que aún no se repone del horror que se vive con tragedias como la de Villas de Salvárcar, una comunidad que continúa sufriendo y aunque no se repone aún de las anteriores injusticias, ya está recibiendo una más. ¿Es este el camino correcto? ¿Para qué? ¿Para quiénes? Porque es más que claro que para los juarenses no. A dónde pretenden llevarnos por este camino. A un callejón sin salida, a una trampa, a un despeñadero ¿a dónde? ¿Qué entiende el presidente por camino correcto? Los que no nos hemos marchado de esta frontera estamos muy preocupados cuando el presidente Calderón dice que ni un paso atrás en esta absurda y costosa guerra. Afirma un día sí y otro también que los operativos continuarán con paso redoblado, pésele a quien le pese, no importando los daños colaterales, que por cierto para él parecen no significar mayor importancia. Lo más delicado es que los juarenses ya no podemos dar un solo paso más al frente, porque aquí estamos al borde...del precipicio.”

El siguiente editorialista es más claro aún sobre la descomposición generalizada en la que está cayendo toda una nación al aferrarse un Presidente vanidoso y soberbio incapaz de reconocer sus errores a sus malas decisiones tomadas por circunstancias puramente políticas:

Masacres juveniles, réquiem por el gobierno
Jenaro Villamil
Agencia APRO
26 de octubre del 2010

Una nueva matanza de adolescentes en Ciudad Juárez, Chihuahua, cimbra a todo el mundo. Y en Tijuana, Baja California, se repite con saña la historia de una masacre de jóvenes en centros de recuperación. El miedo entre estudiantes de Monterrey, Nuevo León, recorre las principales universidades de esta capital financiera. Y nadie se atreve a salir ya a las calles de Matamoros o Nuevo Laredo, Tamaulipas.

Las organizaciones defensoras de derechos humanos hablan ya de un “genocidio de jóvenes”, especialmente en Juárez. Uno no sabe si duele más saber que la mayoría de los 14 acribillados en la urbe fronteriza son menores de 20 años, estudiantes de secundaria y preparatoria, o que sus victimarios sean también adolescentes que han perdido cualquier noción de presente y de vida.

Había una mujer embarazada entre los asesinados. Y Marta Arteaga, la anfitriona, de 30 años, fue acribillada. Dejó seis hijos huérfanos. Uno de sus vástagos era el festejado, muerto también.

Los sicarios forman parte de un comando que entró a aquella fiesta privada en la colonia Horizontes del Sur, a dos kilómetros de Salvárcar, el mismo barrio donde fueron masacrados un número similar de adolescentes, en enero de 2010.

Cuentan las crónicas que los asistentes festejaban en el patio de una casa tan humilde como millones de hogares mexicanos. Un hombre de cerca de 20 años llegó hasta el centro de la concurrencia. Gritó quién era el propietario de un automóvil estacionado en el exterior.

Al no haber respuesta, sacó de sus ropas una pistola y comenzó a disparar a diestra y siniestra. “¡Acaben con ellos!”, ordenó.

Fue la señal para que los sicarios, adolescentes encapuchados, salieran de un convoy de siete camiones y rafaguearan durante cinco minutos a los presentes. Mataron a 12 e hirieron a 16. Dos murieron después.

Entre las pocas víctimas fotografiadas está un joven que intentó huir por el estacionamiento delantero de la casa. Su rostro inerte, pelado a rape, de apenas 16 años, yace en el suelo. La expresión lo dice todo. Es la síntesis del juvenicidio imparable en Ciudad Juárez. “Los mocosos muertos”, dijo alguien.

Los vecinos llamaron a las fuerzas policiacas. Tardaron más de 20 minutos en llegar, según diversos testimonios. Nadie vio, nadie escuchó. Las fuerzas del orden que mantienen sitiada Juárez ignoraron a un convoy de siete vehículos que huyó en la noche, en el desierto, en la oscuridad ominosa de la impunidad que acompaña cada una de estas masacres. Siete en menos de 20 meses. Más de cien muertos, el 80% menores de 18 años.

Una de esas masacres fue la ocurrida en marzo de 2009 en el Cereso de Juárez. Entraron al penal a matar a presuntos integrantes de las bandas de los Mexicles y Los Artistas Asesinos. Sus verdugos fueron, al parecer, Los Aztecas.

El gobierno de Felipe Calderón saturó a Juárez de elementos policiacos a partir del operativo Todos Somos Juárez, después de los sucesos en Salvárcar. Prometió que vigilarían las calles y los rincones de la ciudad. Pero nada ha cambiado. La situación es peor. En Ciudad Juárez ya hay más muertos que efectivos estadunidenses caídos en la guerra de Irak.

Los “hombres de ley” también ingresan a los domicilios, a los negocios, a las fiestas para catear, amedrentar, extorsionar o sembrar el miedo. Y son tan escasos los operativos que han resuelto algo.

Recuerdo que en Ciudad Juárez ganaron Pascual Orozco y Pancho Villa, en 1911, la batalla definitiva para darle el triunfo al movimiento maderista. Ahí murió el régimen de Porfirio Díaz. ¿Será en este mismo sitio donde esté muriendo un régimen incapaz de defender con un mínimo de eficacia a sus ciudadanos? ¿Se atreverán a volvernos a decir que se tratan de “ajustes de cuentas” entre pandilleros?

Calderón y el gobernador César Duarte pronuncian frases huecas. “Con tristeza y profunda indignación el gobierno federal manifiesta su más enérgico repudio al asesinato de varios jóvenes en Ciudad Juárez”, escribe Calderón en su cuenta de Twitter. ¿Repudio? ¿Indignación? El presidente es el titular del Ejecutivo federal, no una ONG que se pronuncia frente a un suceso. ¿A qué se compromete? ¿Qué medida va a tomar? ¿Volverá a pagar miles de millones de pesos en spots para que la pantalla comercial no mencione esta derrota de su “guerra” infame?

Comienzo a leer el libro Ciudad del crimen, de Charles Bowden, y vuelvo a estremecerme:

“El periodista puede morir por cometer un error…

“Eso es porque hay dos Méxicos.

“Uno es el que aparece en la prensa de Estados Unidos, un lugar donde el presidente está peleando una guerra valiente contra las fuerzas malignas del mundo de las drogas y utilizando, como guerrero, al incorruptible Ejército Mexicano. Este México tiene periódicos, tribunales, leyes y es considerado una república humana por el gobierno de Estados Unidos.

“Esto no existe.

“Hay un segundo México, donde la guerra es para las drogas, donde la policía y el Ejército pelean por su tajada, donde la prensa es controlada a fuerza de asesinar periodistas o con una dieta permanente de sobornos, y donde la línea entre el gobierno y el mundo de la droga nunca ha existido…

“Hay dos maneras de perder la cordura en Juárez. Una de ellas es creer que la violencia proviene de la guerra de cárteles. La otra es la pretensión de comprender qué hay detrás de cada asesinato. Lo único cierto es que diversos grupos –las pandillas, el Ejército, la policía de la ciudad, la policía estatal, la Policía Federal-- están matando a personas en Juárez como resultado de las ganancias de la droga”.

Apenas hace tres días, la Secretaría de Seguridad Pública (SSP) federal, comandada por Genaro García Luna, anunció --con todo el despliegue mediático que acostumbra-- la detención de 13 presuntos integrantes de La Línea, el brazo armado del cártel de Juárez, y se ufanó de que con ese golpe esa red de sicarios quedaba “prácticamente desmantelada”.

Y ahora todo quedó en los términos que describe Bowden.

La muerte es una industria en Ciudad Juárez. La violencia es el pase automático, la aduana para quien busque permanecer en esta ciudad, pero también en Reynosa, en Matamoros y cada vez más en Monterrey.

Si hace unos cinco años el nombre de Juárez era mundialmente conocido por los crímenes de más de 400 mujeres (de los que ni 10% se ha resuelto), ahora es el epicentro de lo que Bowden llama “un nuevo campo de exterminio de la economía global”.

Del feminicidio al juvenicidio. ¿O debemos decir el Juaricidio?

¿Quieren matar una ciudad, una civilización, un enclave fronterizo?

En Juárez se mata por una grapa, se mata por menos de mil pesos, se mata porque tener armas es lo único que unifica “el poder” de soldados, pandilleros, policías, sicarios, narcos, psicópatas, juniors con poder.

El fácil acceso a las armas que cruzan la frontera de Estados Unidos intoxica tanto o más que los picaderos que han proliferado por toda la ciudad. Juárez es el epicentro de una economía de la violencia. Y Washington sólo se indigna o cierra su consulado.

www.jenarovillamil.wordpress.com

En las elecciones presidenciales del 2006, los agoreros de la ultraderecha se estuvieron desgarrando las vestiduras repitiendo el lema de campaña de Felipe Calderón que en su guerra sucia mediática y con la ayuda de TELEVISA estuvo afirmando sin parar que el candidato izquierdista Andrés Manuel López Obrador era todo un peligro para México. Parte del pueblo de México mordió el anzuelo, la suficiente como para darle una repetición con un segundo sexenio en el poder a la conspiración nacional para llevar al país por el rumbo por el cual lo quieren llevar quienes tienen su propia agenda secreta. Y ahora, a cuatro años después de que lo importante para Felipe Calderón era ganar haiga sido como haiga sido, México ahora va -según él- por el camino correcto.

Sí, claro. Los mexicanos, sobre todo los millones que no comparten con Felipe Calderón y con los Yunques y los Tecos de la UAG las mieles del poder, van todos juntos de la mano por el camino correcto hacia donde lo están llevando quienes están en el poder en estos momentos con ganas de sobra para perpetuarse en el mismo por los siglos de los siglos, para permanecer así sin cambio alguno en el “luminoso sendero” de el camino correcto. Parece ser el nuevo slogan que hoy reemplaza al ya obsoleto lema de campaña que acusó sin cesar al otro candidato presidencial de ser un “peligro para México”, seguramente porque él jamás hubiera llevado a México por el camino correcto a lo largo del cual está siendo llevado por Felipe Calderón.



martes, 19 de octubre de 2010

México, en los tiempos del PAN y del Yunque

La situación en el México co-gobernado por el PAN y el Yunque se está volviendo ya tan inaguantable que inclusive ciertos sectores de los que uno no esperaría este tipo de quejas están lamentando la descomposición en la que ha entrado la Nación bajo la bota de la dupla derecha-ultraderecha. Uno de ellos es el Presbítero Hesiquio Trevizo Bencomo, vocero de la Arquidiócesis de Ciudad Juárez, esa ciudad norteña que está en vías de extinción a causa de la más que imbécil guerra de legitimación desatada por el Presidente Felipe Calderón dizque para acabar con la delincuencia organizada, como podemos verlo en la siguiente nota:

Panem et Circenses
Pbro. Hesiquio Trevizo Bencomo
EL DIARIO
17 de octubre del 2010

Esta frase acuñada por el poder imperial de la Roma decadente encerraba, por una parte una buena dosis de pragmatismo político y, por otra, el profundo desprecio por un pueblo envilecido. El Imperio era la Ciudad. Podía haber guerra en cualquier parte del Imperio, pero la Urbe debía permanecer en paz. La prioridad de los emperadores y el ampuloso Senado Romano era que la Urbe, el populacho, pues, estuviera en paz, es decir, satisfecho. De ahí que la política elemental a seguir era mantenerla bien aprovisionada de trigo y bien provista de diversión.

La rebelión de la Ciudad era más peligrosa para los Emperadores que la rebelión de las tribus bárbaras de las Galias, o la Germania o Hispania o cualquiera otra de las regiones aprisionadas bajo la dudosa categoría de Imperio Romano. Cuando comenzaba el desabasto o faltaban juegos y diversiones suficientes, el pueblo se enfurecía y no solamente el puesto, sino la vida misma del divino Emperador corrían serio peligro. Había que mantener activadas las vías de comunicación para traer trigo de todas las partes del Imperio, del norte de África que era el gran surtidor, de las Galias o del Asia Menor; había que mantener, también, reservas de fieras, gladiadores y demás curiosidades traídas de las tierras conquistadas que hacían las delicias y felicidad de los degenerados, apoltronados, vividores y viciosos ciudadanos de la Urbe. Para eso era Roma. El Imperio Romano era Roma. Aún en sus largas y penosas campañas, los Emperadores tenían que dejar bien abastecida y en paz la Ciudad porque corrían el riesgo de que a su regreso, y no obstante todos los triunfos y trofeos, se encontraran con la desagradable noticia de que ya no eran Emperadores. Había que mantener, pues, satisfecha, contenta y bien abastecida la ciudad, además de una buena red de soplones y policías y a los jefes de las legiones bien forrados para que no se les ocurriera encabezar algún levantamiento. Precauciones, pues.

No pocas veces las circunstancias de desabasto de alimento y la falta de diversión alentaban a los sectores enemigos para aprovechar la coyuntura y destronar y de paso asesinar al divino Emperador. De ahí, pues, que la política elemental estuviera dictada por la sabia frase ofensiva y pragmática: Panem et circenses». Hoy podemos traducir por pan y futbol. (Nota de Spectator: hoy podemos traducir por PAN y futbol.) Ambos de pésima calidad; los romanos no lo hubieran tolerado.

Panem et circenses entrañaba sin embargo un amargo y hondo desprecio por el pueblo. El pueblo envilecido no era más que un medio para que la política, o mejor dicho para que los políticos realizaran sus muy personales planes. La frase pertenece al escritor latino Juvenal y con ella manifestaba el desprecio hacia un pueblo que había perdido su dignidad y que sólo necesitaba pan y diversiones obviamente gratis. Un pueblo que ya no se sentía protagonista de su destino, que ya no sabía exigir, que se contentaba con pan y juegos, que no sabía pedir cuentas; un pueblo que había claudicado y al que no le importaba ya lo que sucediese siempre y cuando tuviese trigo y diversión, sólo merecía el desprecio.

Decimo Giunio Juvenal, poeta latino de la decadencia que cabalgó entre el I y II siglo d. C., fustigó duramente a es pueblo apoltronado que se contentaba con pan y circo. Si el mundo en que vivimos con mucha frecuencia nos indigna, bien podría ser Juvenal un contemporáneo nuestro, dice uno de sus biógrafos. Irritado como pocos, sin embargo, Juvenal era corresponsable de las torpezas que lamenta, al menos tanto como nosotros, escritores o no, fascinados ante la protervia de los poderosos. Tal vez, la sociedad que nos nutre no es en el fondo peor que la de nuestros antepasados, pero sí que en el hombre existe el virus de la indignidad. (Juvenal. M. Ramous). Así fue para Juvenal.

Y es que no decaen sólo los gobiernos, es el pueblo todo el que se va hundiendo poco a poco en la indiferencia, en la apatía, en el abandono, y va renunciando también a su propia dignidad, a las cosas que le son propias y entonces, el final está cerca. Llega la hora de los grandes desórdenes, de la anarquía, de la obnubilación de los dirigentes; comienza la época de los emperadores de la decadencia; el pillaje, la delincuencia, la violencia sin bandera, la descomposición social se hacen presentes, ya no hay leyes, ya no hay quien organice, ya no hay guías y comienza la hora crepuscular. Quien dude al respecto vea el caso de Godoy Toscano; no hablo de partidos, casi ni de personas, sino de hechos de extrema gravedad que revelan el vaciamiento de la política y la indiferencia o impotencia del pueblo, Lea el artículo de Riva Palacio, –El Diario de este viernes–, y verá que el futuro de México está comprometido. Es más, vea la portada del Diario de ese día y pregúntese dónde estamos.

Es la hora también de los graves desórdenes sexuales. Un buen síntoma de esta hora es cuando el pueblo es manejado y conformado con panes et circenses.

Este martes sólo nos faltó una corrida de toros a las 5 de la tarde mientras los poderosos de la decadencia inauguraban un parque remozado, una canchita de futbol rápido y una cancha de basketbol. ¿Todo ese aparato para tan poca cosa? Toda esa movilización policiaca para impresionar –método usado también por los Emperadores Romanos– al pueblo. De nuevo la sabiduría romana: la fábula del Parto de los Montes, fábula genial de Fedro traducida al latín por Esopo. Una vez los Montes parieron; comenzaron los trabajos de parto y los montes rugían, jadeaban y pujaban manteniendo en vilo al universo. Todos esperaban un gran parto, pero los montes parieron un ridículo ratón.

Las reuniones sostenidas con el primer Mandatario del País y sus Ministros con diferentes grupos sociales de la ciudad me dieron la impresión de ser, más una terapia de grupo y un trabajo de tanteo y justificación, que una búsqueda sincera en la dirección correcta. Una suerte de que hablen para que se calmen. Siete mil muertos no le permiten ni a Juárez ni a los poderosos de la decadencia jugar esas bromas. Tiene razón la Carta de El Diario de Juárez de ese día. Siete mil vidas truncadas con todos los efectos colaterales no permiten superficialidades ni ligerezas ni siquiera el juego con el dinero del pueblo. ¿Dónde están los más de 3 mil millones destinados para rescatar y revitalizar a Juárez? Siete mil muertos, los hogares deshechos, las viudas, los huérfanos, los secuestrados, los extorsionados, los estudiantes amenazados, los médicos amenazados, los consultorios y las tienditas de barrio cerradas; siempre los eufemismos para hacer digerible la amargura: ahora vengo a saber que se utiliza la expresión “pago de derecho piso” para referirse a la extorsión. O pagamos la extorsión o a Hacienda y al IMSS, es la conclusión. Y es que la situación es tan inédita, tan intempestiva, que está modificando nuestro lenguaje. Y todo esto no es una simple percepción, Señor Presidente. No son percepciones, amén de que las percepciones se conviertan en realidad. También el lenguaje tiene que ser cuidado, medido, respetuoso. Los jefes, como Edipo, deberían llorar la suerte de su ciudad junto con los ciudadanos. «Ustedes lloran por su dolor cada uno; yo lloro por el dolor de todos ustedes», dice el desgraciado Edipo a los habitantes de Colono.

Suelo empezar temprano los trabajos. Este miércoles, mientras escribo, mandé por unos “burritos” (no venden de winnies) y me enteré que en esa pequeña cocinita, en ese puestecito casero, se vieron obligados a cerrar por la extorsión, ¡Hágame usted el grandísimo favor En otros estados es más espectacular la situación, aquí es terriblemente efectiva, demoledora; los asesinatos no cesan y las extorsiones y secuestros o “cobro de derecho de piso” van a la alza. La impunidad es tal que la tentación para convertirse en delincuente resulta demasiado atractiva. Llevas un 98% a tu favor si te decides. ¡Y cuántas quejas hay ¡Cuánta insatisfacción ¡Cuánto cansancio ¡Qué hartazgo ¡Qué ofensivo resulta ver esos despliegues de poder Y una vez más volvemos a la cultura latina, a los mejores momentos del Senado y oímos a Cicerón increpar a los presentes: Ubinam gensium sumus. In qua urbe vivimos. Quem rempublicam habemus. (¿Entre qué gente estamos? ¿En qué ciudad vivimos? ¿Qué República tenemos?). No quiero sin embargo ser profeta de desastres. No. Ojala, Dios quiera, que todas estas medidas den resultado, que las nuevas autoridades en nuestra Ciudad y nuestro Estado, perfectamente coordinadas encuentren el camino para revertir esta situación.

El Diario de Juárez nos da completa reseña este miércoles de lo sucedido el martes. Y a 8 columnas parece resumir el resultado final: Viene con las manos vacías….¡Y sólo deja promesas Bien puede ser la percepción de un medio pero parece que el discurso presidencial se mueve en esa dirección. En su anterior visita se destinaron más de 3 mil millones de pesos para rescatar Juárez. Las elecciones estaban en puerta. Meses después, la situación ha empeorado y esa descomunal cantidad de dinero tal parece que no ha dado resultado, lo cual me lleva a mí al convencimiento de que el asunto no es, al menos en primer lugar, una cuestión de dinero. En todo caso, de un manejo mucho más acertado, más delicado, más transparente, en el manejo del gasto social.

“El Ejecutivo Federal reconoció ante los sectores juarenses que la violencia ha aumentado, pero ante la situación y planteamientos expuestos, sólo se pronunció porque se rectifiquen los procesos seguidos hasta ahora, y reiteró que el problema también es de percepción de la ciudadanía, sin ofrecer respuestas concreta”, reporta El Diario. Que ha habido un aumento en cantidad y calidad de la violencia en nuestra ciudad, es una verdad del tamaño de una Catedral; no es una simple percepción, todos los juarenses conocemos de viva voz, conocemos a personas, familiares, amigos, que han tenido que afrontar esa dinámica terrible de la violencia. Los niños en las escuela están asustados, los estudiantes mayores, igual; los profesionistas huyen. A ellos hay que preguntarles si es realidad o percepción. A todos los que han tenido que abandonar la ciudad por las mismas causas, habría que preguntarles lo mismo. Más bien, habría que preguntarnos sobre la eficacia y eficiencia de las políticas organizativas y de las políticas del gasto social. De qué han servido más de 3 mil millones de pesos? ¿Dónde andan?

El Güerito Valenzuela, (para ustedes el Dr. Arturo Valenzuela Zorrilla) habló breve y sustancioso: “Es necesario combatir la injusticia que se vive o los esfuerzos serán inútiles”, dijo. Pero “el Güerito” no puntualizó las injusticias que tenemos que combatir. Porque las injusticias son muchas, muy diversas y de muy distinto color. La injusticia primera es la pobreza que roba la dignidad de la persona. Hizo bien el Güerito Valenzuela de recordarle al Presidente que en Marzo pasado, prometió más agentes del Ministerio Público en la localidad por lo que ahora le pidió dijera cuándo cumplirá su palabra y dijera el número de elementos que enviará. Y ya encarrerado, el Güerito añadió: “Que no hay avance sobre todo en delitos de alto impacto. Pecaría de ingratitud no reconocer el apoyo de la Secretaría de Seguridad Pública, pero los delitos no disminuyen y por el contrario, van al alza”, concluyó. Y en verdad se quedó corto. En realidad Juárez vive una situación agónica. Y la sensación de impotencia e inseguridad es la atmósfera que se respira. Repito, habrá lugares donde la violencia es muy espectacular, pero aquí en Juárez es una sangría lenta, una herida que no deja de sangrar, que sangra día y noche, una herida por la que la ciudad misma se desangra. Y no me queda más remedio que recordar, la frase de Vargas Llosa en “Diálogos en la Catedral”, donde el protagonista se pregunta atónito: “Cuándo se nos jodió el Perú”. Así nosotros; una ciudad en la que teníamos pleno empleo, mucho circulante, mucho comercio, “mucho turismo”, mucho de todo, y también mucho desmadre. ¿Cuándo y cómo se nos perdió la ciudad? Y tal parece que lo único que nos preocupa es no hacer negocio.

Pero no nos vayamos con la finta. Ya dijimos que la frase de Juvenal expresa el desprecio por una sociedad que ha abdicado. Sobre esto también llamo la atención de mi querido Güerito Valenzuela. Ha estado apareciendo la noticia recurrente de que se promoverá en las Prepas el uso del condón. ¿Qué queremos solucionar con los condones? ¿Qué refleja esa política? ¿Qué esta sucediendo en nuestras familias y a nuestros jóvenes? ¿Qué es de la educación sexual? ¿Quién gana con estas políticas? ¿No será esto una claudicación, un ir cediendo terreno mientras que por otro lado estamos hablando de valores? Esto, y no por los condones, sino por lo que el hecho refleja; revela un problema muy serio de autocomprensión y de antropología. La nota, también de El Diario, dice: En los 5 colegios de Bachilleres se promueve entre los alumnos una sexualidad responsable, indicó José Jesús Padilla Moreno, Coordinador Sectorial de COBACH en Ciudad Juárez”. La más elemental pregunta sería: A esa edad, ¿podemos hablar de actitudes verdaderamente responsables en nuestros jóvenes? ¿Qué es la responsabilidad? ¿Responsables ante quién o ante qué? ¿De qué vamos a responder? ¿Es esa la educación sexual? ¿Qué es una responsabilidad en lo sexual? ¿No estaremos vendiendo falsas seguridades, y peor aún, falsas ideas? Es, más bien, la banalización de la persona humana.

Porque, mire usted, la siguiente nota, también de El Diario. “Son adolescentes el 40% de las embarazadas”. Yo invito a cualquier sociólogo, a cualquier interesado en la cuestión humana y en la cuestión social desde las distintas disciplinas que abordan tan compleja realidad a que reflexione en este dato: 40% de los embarazos son adolescentes. Y si no reducimos la adolescencia a la edad sino que la juzgamos desde punto de vista de la madurez humana, vamos a encontrar bastantes adolescentes “remisos”, es decir, de 19, 20 ó 30 o más años. Sume a esto la disfunción familiar, sume a esto la cantidad de niños mono parentales, los divorcios, etc., y se va a dar usted cuenta del panorama que se nos presenta. Se trata de un problema de primer orden. Si no reconocemos que la integración familiar, la protección de la familia, la ayuda auténtica y efectiva a la familia son los presupuestos de una sociedad sana, (Hegel), vamos a estar en graves problemas.

La familia posee vínculos vitales y orgánicos con la sociedad, porque constituye su fundamento y alimento continuo mediante su función de servicio a la vida. En efecto, de la familia nacen los ciudadanos, y éstos encuentran en ella la escuela primera de esas virtudes sociales, que son el alma de la vida y del desarrollo de la sociedad misma. Olvidar esto, nos puede resultar demasiado caro.

No es con ejército ni policías, al menos no únicamente, como vamos a solucionar nuestra problemática. Queremos que cambie todo, pero no queremos cambiar cada uno de nosotros y todos sabemos lo que tenemos que cambiar en nuestra vida. Nos parecemos mucho a la sociedad que fustigaba Juvenal.

Al pueblo, PAN y circo. Mucho PAN y mucho circo. O mejor dicho, PAN y futbol. Mucho PAN y mucho futbol. Con la ayuda de TELEVISA, naturalmente. Esto, mientras se le va preparando mentalmente a través de spots subliminales para que refrende al PAN un tercer sexenio en el poder en las elecciones presidenciales del 2012, usándolo para convertir a México en una democracia tan simulada como la que había en los tiempos del dictador Porfirio Díaz cuando también se efectuaban elecciones en las que el ganador ya era conocido de antemano.

sábado, 9 de octubre de 2010

Versalles: deuda saldada

Pasando desapercibido para muchos, el 3 de octubre del 2010 tuvo lugar de manera silenciosa y sin muchas fanfarrias un acto que marcó el cierre del capítulo final de la Primera Guerra Mundial, un capítulo que había estado pendiente como una herida abierta que se rehusaba en sanar. El acto en cuestión fue el pago final de las reparaciones de los daños que Alemania aceptó pagar tras su rendición con la cual la Primera Guerra Mundial llegó a su conclusión. El anuncio anticipado del saldo de la deuda apareció publicado en medios como el siguiente:

Alemania liquida su deuda por la Primera Guerra Mundial
Notimex
29 de septiembre del 2010

El próximo domingo Alemania abonará el último pago por las reparaciones de la Primera Guerra Mundial, 92 años después del Tratado de Versalles.

El último pago asciende a 70 millones de euros y fue incluido en el presupuesto anual del Estado con el fin de que coincidiese con el 20 aniversario de la reunificación.

Los vencedores de la Primera Guerra Mundial decidieron en el Tratado de Versalles que Alemania pagará 20 mil millones de marcos de oro para las reparaciones de la guerra, aunque la cifra aumentó a 296 mil millones de marcos de oro en la siguiente conferencia de Boulogne de 1920.

Muchos historiadores señalan a dichas imposiciones como uno de los factores que contribuyeron a la crisis económica alemana de los años 20 y al sentimiento de humillación que propició el auge del partido nazi.

Uno de los más críticos con el monto de la deuda fue el economista británico John Maynard Keynes, quien lo calificó como "una barbaridad" y “excesivo”. De hecho, en 1924 y 1928 se acordó aligerar los pagos.

Durante los años 20 varias crisis inflacionistas y el crack del 29 afectaron duramente a Alemania que tenía el gobierno denominado “la República de Weimar”, dependiente de préstamos extranjeros para poder pagar las imposiciones.

Por entonces, la decisión de Adolfo Hitler de revocar el Tratado de Versalles fue bastante popular entre los alemanes.

Tras la Segunda Guerra Mundial, los aliados acordaron reducir a la mitad el monto de la deuda en la Conferencia de Londres de 1953, y hasta 1983 la República Federal Alemana abonó 14 mil millones de marcos para compensar los daños.

No obstante, una claúsula de dicha Conferencia establecía que los intereses de la deuda (125 millones de euros) se pagarían cuando Alemania se unificase, por lo que el cumplimiento de dicho compromiso se reanudó en 1996.

Gran parte del dinero de la deuda fue pagado a personas privadas, fondos de pensiones y grupos empresariales, según lo estipulado el 28 de junio de 1919 en Versalles.

De acuerdo con el periódico alemán Bild, “este domingo se cumplirá con la última factura y así terminará por fin la Primera Guerra Mundial para Alemania (...) al menos financieramente”.

Con el pago final a la deuda contraída por Alemania con motivo del Tratado de Versalles, no sólo se cerró en definitiva un capítulo trágico en la historia de la humanidad. También se vino abajo estrepitosamente por los suelos una más de las miles de mentiras a las que son tan afectos los pseudo-historiadores de la ultraderecha mundial en su propaganda chatarra y que han ido cayendo por su propio peso con el paso del tiempo, la falacia de que la deuda impuesta por los países vencedores sobre Alemania en el Tratado de Versalles era una deuda impagable. ¡Claro que la deuda era pagable! Obviamente, no se podía pagar en un solo día, pero de que la deuda era pagable hoy ya no existe absolutamente ninguna duda. Se acaba de terminar de pagar. Para apoyar la burda tesis de que los pagos económicos impuestos sobre Alemania por el Tratado de Versalles (al cual el pseudo-historiador revisionista reducto de lo más duro del fascismo español Joaquín Bochaca le dedica un capítulo entero en su libro La Historia De Los Vencidos) no se podrían saldar jamás, muchos pseudo-intelectuales de la extrema derecha gustaban de citar a tipos como el economista británico John Maynard Keynes. Por supuesto, durante el Gobierno de Adolfo Hitler no se abonó ninguna cantidad por este concepto. Pero eso sí, el economista John Maynard Keynes se equivocó rotundamente al afirmar que Alemania jamás terminaría de pagar, poniendo a los historiadores revisionistas del fascismo contemporáneo en el duro dilema de tener que darle un revisionismo más a sus propias obras revisionistas para evitar quedar en ridículo ante un auditorio mundial que se está dando cuenta de las mentiras tramposas con la cual construye su propaganda chatarra la extrema derecha de corte neo-Nazi.

Independientemente del hecho de que la carga de la factura por reparación de daños impuesta sobre Alemania por los países vencedores llevaba el estigma de la humillación de la derrota, un estigma que le facilitó enormemente a Adolfo Hitler su ascenso al poder al prometerle a los alemanes una dulce y terrible venganza, otro hecho que frecuentemente es pasado por alto es que los Tratados de Versalles no sólo impusieron sobre el vencido los costos de una enorme reparación económica de daños. También se impuso sobre Alemania la prohibición de llevar a cabo un rearme. Con justa razón, los negociadores de las potencias aliadas sentados en la mesa de negociaciones, teniendo en mente que fué al final de cuentas la agresiva tradición militarista alemana la que actuó como el principal detonante de la Primera Guerra Mundial, demandaron en forma unánime que Alemania desistiera de poder volver a convertirse en una amenaza militar para sus vecinos, comprometiéndose a prescindir de aquellos ejércitos y aquellos armamentos con los cuales Alemania sintiéndose superior creyó que podría imponerse sobre Europa. Y aunque los embajadores plenipotenciarios de Alemania aceptaron tal clásula comprometiéndose a que Alemania no volvería a constituírse nuevamente en una nación agresora, ¡cuán equivocados estaban quienes creyeron que Alemania cumpliría esta importantísima parte del pacto!

Al igual que como ocurre con el mitológico canto de las sirenas que llevaba a la perdición a quienes no se tapaban los oídos, Adolfo Hitler y su otrora ridículamente minúsculo partido Nazi aprovecharon el momento histórico para seducir a los alemanes con promesas luminosas como las que acostumbra hacer la extrema derecha a sus seguidores alrededor del mundo, prometiendo un “nuevo orden” que implícitamente llevaba consigo veladamente la promesa de una venganza dulce y terrible en contra de las potencias aliadas por la humillación sufrida por la derrota en la Primera Guerra Mundial, pese a que fue la misma Alemania militarista de Bismarck y Hindenburg la que inició tan desastrosa aventura militar que con la derrota de los rusos en la batalla de Tannenberg en 1914 prácticamente derrumbó a la monarquía zarista facilitándole a los bolcheviques el darle la puntilla al gobierno imperial de Rusia. Y en cuanto los Nazis llegaron al poder en Alemania, con el pretexto de que a ningún país se le podía negar el derecho de contar con un ejército para defender su propio territorio Hitler empezó con un rearme militar gigantesco que, además de crear numerosos empleos entre los trabajadores alemanes que estaban desempleados estimulando artificialmente con ello la economía, preparó a Hitler no para la defensa legítima del territorio alemán en caso de una invasión externa sino para llevar a cabo desde Alemania la invasión del resto de Europa, para lo cual estuvo construyendo y estuvo almacenando por años enormes cantidades de fusiles, granadas, bombas, tanques, submarinos, aviones, cohetes, lanzallamas, explosivos, buques de guerra, en fin, todo lo que se podía construír para garantizar el éxito de la conquista y el soguzgamiento de Europa. Sólo cuando Hitler dió inicio a su locura megalómana llevando a cabo la invasión de Polonia en 1939 el mundo entero se dió cuenta demasiado tarde de que Hitler se había armando hasta los dientes en violación directa a lo estipulado en el Tratado de Versalles.

El Tratado de Versalles no sólo había comprometido a Alemania a no volver a convertirse nunca más en un agresor abusivo y despiadado en contra de sus vecinos valiéndose de su poderío industrial. También a instancias del Tratado de Versalles se creó la Sociedad de las Naciones, precursora de la O.N.U., con la finalidad de que los conflictos y los diferendos entre las naciones se pudiesen resolver de manera pacífica a través de negociaciones diplomáticas evitando con ello que se repitiese la enorme tragedia humana que fue la Primera Guerra Mundial. Entendiblemente, Hitler de manera unilateral retiró a Alemania de la Sociedad de las Naciones por el obstáculo que esta representaba para sus agresivos planes expansionistas.

Si Hitler no hubiese llegado al poder en Alemania y se hubiese respetado el Tratado de Versalles al pie de la letra, es de pensarse que Alemania eventualmente se habría recuperado de su grave situación económica no fincando sus esperanzas sobre una economía para tiempos de guerra sino en una economía para tiempos de paz como hoy lo hace. Y eventualmente habría terminado de pagar la deuda contraída en el Tratado de Versalles, demostrando cuán equivocados estaban los propagandistas amateurs del fascismo en su afirmación de que la deuda era impagable.

En realidad, años antes de que Hitler llevara a cabo la invasión de Polonia desencadenando con ello la Segunda Guerra Mundial, los servicios de inteligencia de Inglaterra y Francia estaban conscientes de que Alemania bajo el Nazismo se estaba armando hasta los dientes en una proporción desmesurada que iba mucho más allá de lo que se requería para contar con un ejército meramente defensivo. Al igual que como había ocurrido en el preludio de la Primera Guerra Mundial, era tan sólo cuestión de tiempo para que Alemania volviera a constituírse en un peligro para el resto de Europa. Si en el camino al rearme de Alemania en la década de los años treinta las potencias aliadas se hubieran juntado nuevamente para emprender una invasión en contra de Alemania obligándola a cumplir con su parte de lo pactado, es posible que la Segunda Guerra Mundial no habría podido llevarse a cabo al no poder contar Hitler con las enormes cantidades de armamento requerido para llevar a cabo sus planes de invadir al resto de Europa. Pero tras la enorme tragedia que había significado para las potencias vencedoras la Primera Guerra Mundial, ya no había estómago para volver a entrar en un nuevo conflicto con Alemania, y simplemente se dejó que Hitler continuara con la formación de sus legiones de hordas invasoras, pagando a un alto precio el haber ignorado la máxima romana que dice “si quieres la paz, prepárate para la guerra”.

La agresividad del militarismo alemán, sobreamplificada por el fanatismo inculcado por Hitler y sus secuaces entre sus embobados seguidores, tenía a fin de cuentas como uno de sus principales objetivos la invasión descarada de otros países con la finalidad de anexarse los territorios conquistados como botín de guerra, y para este objetivo de agresión el Tratado de Versalles -en el cual los alemanes habían empeñado su “palabra de honor” de que sería cumplido cabalmente al pie de la letra- representaba un estorbo. La siguiente fotografía de una publicación de propaganda Nazi para su distribución masiva publicada el 9 de junio de 1937 hace una referencia directa a la violación socarrona y directa que pensaba llevar a cabo Hitler de todo lo que se había pactado y aceptado acatar en el Tratado de Versalles:





Y como un preludio a la invasión de Polonia que se llevaría a cabo unos cuantos meses después, la siguiente fotografía nos muestra otra portada de propaganda Nazi del 8 de febrero de 1939 argumentando que 80 millones de alemanes vivían en “apenas” 580 mil kilómetros cuadrados, lo cual “no era suficiente”, esto sin contar con que cuando se había imprimido dicha “justificación” a las invasiones descaradas que Hitler estaba por llevar a cabo en contra de sus vecinos ya se había consumado la anexión de Austria:





La justificación Hitleriana para sus feroces guerras de invasión y anexión tomando de otros a sangre y fuego lo que no era de los alemanes (jurídicamente hablando, un robo) es, desde luego, la doctrina del espacio vital o lebensraum, un eufemismo para no llamarle saqueos a los latrocinios que los Nazis querían llevar a cabo a costillas de sus vecinos. (Este tramposo argumento Hitleriano de que el espacio con el que ya contaban no les alcanzaba a los alemanes siempre fue un argumento falso. De acuerdo a las estadísticas de julio del 2005, Japón con una densidad de población de 337 habitantes por kilómetro cuadrado había logrado convertirse en la tercera potencia económica mundial con un nivel de vida envidiable, una densidad de población ciertamente mayor que la de Alemania estimada también en el 2005 en 229 habitantes por kilómetro cuadrado, por lo que la afirmación Hitleriana de que ya no era posible seguir creciendo en el vasto territorio disponible “por falta de espacio” se debe tomar como una burda farsa, una más de las miles de falsedades en las cuales se basó el Nazismo repetidas como matraca por los revisionistas pseudo-historiadores falaces de hoy tales como Joaquín Bochaca).

Siete meses después de haberse impreso la propaganda anterior como “preparativo de guerra”, las hordas invasoras del Nazismo entraron en Polonia el 1 de septiembre de 1939 matando a millares de militares y civiles en algo que ya los mismos Nazis se relamían como un anticipo de la dominación total de Europa, entendiéndose esto como un preludio de la dominación mundial que Hitler pretendía llevar a cabo.

El rapaz criminal Adolfo Hitler no tenía absolutamente ninguna justificación en haber ordenado la invasión de Polonia (máxime que Polonia no había hecho absolutamente nada en contra de Alemania para justificar tal agresión) salvo el satisfacer sus apetitos megalómanos de dominio mundial (todavía hay uno que otro neo-Nazi tarugo que cree que la única finalidad de la Alemania Nazi era acabar con el comunismo a sangre y fuego sin esperar absolutamente nada a cambio excepto el agradecimiento del resto del mundo), como tampoco tuvieron los Reyes Católicos de España y sus hordas de Conquistadores saqueadores justificación moral alguna para emprender una invasión brutal del continente americano con el solo propósito de satisfacer sus voraces e insaciables apetitos de oro y plata (todavía hay uno que otro tarugo en las filas de la ultraderecha mexicana que aún se cree el cuento de que la única y principal motivación para llevar a cabo la Conquista de América por parte de los españoles fue el llevar a cabo “la evangelización de los indios y la salvación de las almas” incluyendo aquellos indios que terminaron trabajando y muriendo como mano de obra esclava en las minas que fueron prontamente abiertas por sus verdugos llegados del viejo continente. ¡Ja!). Tampoco tenía Hitler justificación alguna para violentar la “palabra de honor” empeñada por los alemanes en los Tratados de Versalles de que no volverían a convertirse en un peligro para el resto de Europa. Tras la invasión Nazi de Polonia, Winston Churchill comprendió que con una ultraderecha alemana carente de escrúpulos y de palabra de honor no quedaba ya más opción que luchar de frente en contra de tan grave amenaza, y aunque aún hay algunos tarugos de la ultraderecha mexicana y de la ultraderecha española que no se cansan de estarle inventando raíces judías a Churchill -para que “embone” dentro de la estrafalaria y desacreditada fantasía acerca de “la gran conspiración judía masónica comunista” para el dominio del mundo- enfadados de que Churchill se interpusiera entre Hitler y sus planes de invasión y expansión de la Alemania Nazi, lo cierto es que la acción decidida de Churchill proporcionó el tiempo valioso que los Aliados requerían para poder emparejarse con el enorme poderío militar amasado por Hitler para sus planes de conquista y dominación mundial.

Aunque el mendaz pseudo-historiador fascista español Joaquín Bochaca afirme que el Tratado de Versalles era “un tratado de odio y latrocinio”, lo cierto es que las potencias vencedoras, de haberlo querido, podrían haber borrado a Alemania del mapa de Europa al concluír la Primera Guerra Mundial. El que Hitler haya podido contar con un país vasto con amplios recursos desde el cual pudiera ensamblar su colosal plataforma de guerra debe tomarse como un reconocimiento a las potencias aliadas de que, pese a todo, tuvieron la caballerosidad de saber respetar la integridad de Alemania pese a los voraces apetitos expansionistas que la llevaron a declararle la guerra en primera instancia a sus vecinos. (Sin embargo, de haber sabido que Alemania daría a luz a la barbarie del Nazismo iniciando una guerra inhumana mucho más violenta y mucho más sangrienta y costosa que la Primera Guerra Mundial, es muy posible que las potencias aliadas habrían optado por repartirse entre sí el territorio alemán desapareciendo para siempre al agresor. Y de hecho, muchos historiadores suponen que la razón principal por la cual el dictador ruso Stalin se negó a retirar a las tropas soviéticas de la mitad de Alemania manteniéndola dividida territorialmente fue precisamente para evitar una segunda invasión alemana de Rusia ordenada por un dictador demente más megalómano aún que Hitler, una medida que aunque ciertamente controversial le dió muy buenos resultados a los soviéticos ya que desde 1945 hasta el año de 1990 en el que Alemania llevó a cabo su reunificación no hubo hostilidades en Europa. ¡Casi medio siglo de paz! ¡Ni siquiera la misma Alemania desde los tiempos del imperio prusiano experimentó un período tan prolongado de paz con sus vecinos, tiempo que los alemanes aprovecharon para mejor ponerse a trabajar en el engrandecimiento de su economía convirtiéndose en una de las principales potencias económicas mundiales!)

Dicho sea de paso, otro mito falaz repetido una y mil veces por la propaganda chatarra del neofascismo que está siendo diseminada y promocionada en los países de habla hispana por grupos tales como los núcleos más duros del Franquismo (en España) y la Organización Nacional del Yunque así como la sociedad clandestina de extrema derecha Tecos de la Universidad Autónoma de Guadalajara (en México) es aquél según el cual los líderes de las potencias aliadas (a todos los cuales les han inventado ancestría judía para ponerlos a tono con la fantasía ultraderechista de “la gran conspiración judía masónica comunista”) complotaron y conjuraron para entregarle al comunismo la mayor cantidad posible de territorio europeo. Como ya se dijo arriba, fueron los mismos alemanes quienes tras la destrucción casi total del ejército imperial ruso en la batalla de Tannenberg prácticamente le entregaron el poder a los revolucionarios rusos. Si hubiera sido cierta la fantasía de que adondequiera que llegaban las tropas rusas enviadas por Stalin llegaban para quedarse en forma permanente sin intención alguna de salirse jamás, Stalin jamás le habría dado la orden a sus generales de retirar las tropas rusas de Austria después de haber tomado la misma capital de Austria, Viena, el 13 de abril de 1945. La ocupación soviética de Austria duró diez años, pero terminó pacíficamente sin necesidad de tener que disparar una sola bala cuando el Canciller conservador Julius Raab (no-judío ni masón ni comunista) visitó Moscú el 12 de abril de 1955 con la finalidad de llevar a cabo las negociaciones que culminaron el 15 de mayo de 1955 con el Tratado del Estado Austriaco (Staatsvertrag). El tratado entró en vigor el 27 de julio de 1955 y adquirió plena vigencia cuando el 25 de octubre de 1955 las tropas soviéticas abandonaron Austria definitivamente. ¿Y por qué razón aceptó Stalin retirar sus tropas pacíficamente de Austria devolviéndoles a los austriacos la plena integridad de su territorio, pese al enorme sacrificio en términos de millones de vidas que tuvo que pagar Rusia para poder responder a la invasión iniciada por Hitler? Pues por la sencilla razón de que no se consideraba a Austria como una amenaza para la paz europea y la supervivencia de Rusia, considerándola por el contrario como una víctima más del Nazismo. El Tratado Staatsvertrag fue respetado al pie de la letra por Stalin garantizándole con ello a los austriacos su plena libertad e integridad territorial, a diferencia del comportamiento mostrado por el Nazismo hacia el Tratado de Versalles pese a que los alemanes habían empeñado su “palabra de caballeros” de que cumplirían al pie de la letra con todos los términos de lo acordado en Versalles. La posibilidad de que pudiera resurgir el Nazismo en Alemania y de que bajo la dictadura de otro criminal tan rapaz como Hitler se pudiera emprender otra “guerra de conquista” en contra de Rusia fue más que suficiente para mantener a los soviéticos con los pelos de punta por varias décadas. Habiendo sido a fin de cuentas la Segunda Guerra Mundial una agresión hostil iniciada por la Alemania Nazi con la cual Hitler tenía todas las intenciones del mundo de apoderarse de Rusia (y posteriormente, del mundo) reduciendo a los rusos a la condición de esclavos, desde el punto de vista militar los soviéticos tenían todo el derecho del mundo de pagarle a los alemanes con la misma moneda borrando de la faz del planeta a la parte de Alemania de la cual habían logrado apoderarse y reubicando a toda su población hacia Europa del Este en forma tal que en todo el territorio alemán no quedase un solo alemán ni quedase rastro alguno de la cultura alemana, haciéndole de este modo a los alemanes exactamente lo mismo que lo que Hitler tenía planeado hacer con los rusos en caso de haber ganado la guerra. Pero no lo hicieron, porque nunca fue esa la intención. El objetivo de los estrategas rusos era hacer todo lo que pudiesen hacer para impedir que Alemania pudiera ser nuevamente la causante de otra gran guerra, una Tercera Guerra Mundial que se habría llevado a cabo con bombas atómicas. Lo cual, afortunadamente, se logró a costa de mantener a Alemania dividida en dos partes por espacio de casi medio siglo.

Con el pago final de los gastos por reparaciones de guerra contraídos en los Tratados de Versalles, los alemanes esperan dejar atrás esa época que siempre les ha traído muy malos recuerdos. Sin embargo, el enorme cargo de culpabilidad que cayó sobre ellos porque sus progenitores no supieron ni quisieron respetar su palabra de caballeros dada solemnemente en los acuerdos pactados en Versalles, sobre todo la cláusula de que Alemania no volvería a constituírse nunca más en un agresor de sus vecinos, eso es algo con lo que les guste o no les guste van a tener que cargar con ello sobre sus conciencias y en su memoria histórica por el resto de sus vidas, del mismo modo que los turcos y sus descendientes van a tener que vivir por el resto de sus vidas con el remordimiento en su conciencia histórica como nación por el genocidio armenio que sus ancestros cometieron, del mismo modo que los españoles de hoy y sus descendientes van a tener que vivir por el resto de sus vidas con el remordimiento en su conciencia histórica de los genocidios que se llevaron a cabo en el recién descubierto continente americano a manos de los Conquistadores saqueadores enviados por los “muy devotos” y “muy religiosos” Reyes Católicos el dizque muy respetuoso de la vida humana Fernando II y su esposa Isabel, hordas invasoras armadas hasta los dientes (muy al estilo de Hitler) sedientas de oro y plata. Definitivamente, hay deudas que no pueden ser saldadas con ninguna cantidad de dinero, porque no existe castigo humano alguno que pueda estar a la altura de los crímenes cometidos cuando se trata de crímenes de lesa humanidad como los que cometieron Hitler y sus cómplices, los turcos otomanos, y los emisarios en el continente americano que fueron enviados por una España autoproclamada devotamente católica y cristiana.

martes, 5 de octubre de 2010

Corrupción Yunquista

Los adalides y militantes de los movimientos clandestinos de la ultraderecha mexicana que cada día está adquiriendo mayor fuerza y mayor penetración en todos los estratos de la sociedad mexicana por su manera clandestina de actuar reforzada mediante los terribles juramentos de lealtad que cohesionan a sus miembros al igual que como ocurre con cualquier mafia criminal, desde siempre se han proclamado fieles “cristianos y católicos” que dándose baños de pureza afirman estar dispuestos a “sacrificarse” en defensa de los valores religiosos legados por Jesús de Nazareth, desde siempre se han proclamado modernos “Caballeros Templarios” en cuyas castas y purísimas manos descansa la “salvación de la humanidad” mientras llega la hora del Apocalipsis.

¿Realmente están estos dizque “salvadores de la humanidad” por encima de las tentaciones humanas que hacen sucumbir al resto de los mortales ante los señuelos de gloria personal, poder y dinero a manos llenas? ¿Realmente son tan incorruptos como se proclaman, especialmente sus líderes? Uno de los mejores ejemplos para dar respuesta a esta incógnita lo constituye el hoy extinto “Zar de la ultraderecha” mexicana, Antonio Leaño Alvarez del Castillo, ex-Rector vitalicio de la ultraderechista Universidad Autónoma de Guadalajara, el cual se entregó en cuerpo y alma no sólo al principal objetivo de su vida que siempre consistió en amasar entre sus manos la mayor cantidad posible de dinero a costa de lo que fuera, sino también a la promoción y fundación de sociedades secretas con el objeto de instalar un poder oculto en las altas esferas de la política que respondiese a sus dictados y sus caprichos, sociedades secretas que hoy le sobreviven y continúan con su funesta y mortífera encomienda aunque el ser mezquino y despiadado que las propició ya no está entre los habitantes de este planeta. Otro ejemplo lo constituye el todavía presidente nacional del partido en el gobierno, César Nava, reconocido juramentado dentro de la funesta sociedad clandestina de ultraderecha conocida como El Yunque, un hecho que la monstruosa maquinaria desinformativa al servicio del PAN-Gobierno como el monopolio TELEVISA se ha encargado de minimizar o de plano ignorar pese a la enorme importancia y a las vastas consecuencias que tal hecho tiene para la vida de toda una nación y sus más de 100 millones de habitantes. En el siguiente artículo podemos darnos una idea de la verdadera calidad moral de César Nava que comparte con sus colegas que desde las “alturas” gobiernan y mandan como un gobierno paralelo secreto aún en vías de instalación en todo México:

César Nava, emerge la corrupción
Álvaro Delgado
Agencia APRO
4 de octubre del 2010

Por lo visto el presidente del Partido Acción Nacional (PAN), César Nava, no gastó durante cuatro años en comer, beber, vestirse, alojarse y divertirse, ni siquiera en la manutención de sus tres hijos. Ahorró todos sus ingresos para comprar una casita de 15 millones de pesos en Polanco.

El problema es que ni así, sin gastar nada de todas sus percepciones durante cuatro años, es posible que Nava haya podido reunir el dinero para adquirir el departamento de recién casado en un edificio de lujo que tiene vista al Castillo de Chapultepec.

Aun si el precio de la vivienda de lujo fue de sólo 7.5 millones de pesos, como aseguró Nava a través de un comunicado del PAN, tampoco hay manera de que le salgan las cuentas.

Sus propias cifras lo delatan: Durante casi dos años como secretario particular de Felipe Calderón y un año como diputado federal cobró, sólo en sueldos, poco más de 4.5 millones de pesos.

Y más aún: Al inicio del sexenio, tenía una deuda de 4 millones 100 mil pesos --casi la misma cantidad que ganó en cuatro años-- por haber comprado, en agosto de 2006, una casa donde vivía con su anterior familia.

Así, salvo que se haya sacado la Lotería o el Melate, que haya recibido una multimillonaria herencia o que el gasto lo haya hecho Patricia Sirvent, quien desde el sábado 2 de octubre es su esposa, hay elementos para presumir que Nava adquirió esa propiedad con dinero mal habido.

No es la primera vez que el próximo expresidente del PAN está bajo sospecha de corrupción, particularmente en su gestión como abogado general de Petróleos Mexicanos (Pemex) --empresa donde fluyen comisiones por los multimillonarios contratos--, ni es raro que la facción gobernante incurra en tal conducta.

(Un ejemplo es el manejo que, con la total complacencia de Calderón, hizo Patricia Elizondo no sólo del multimillonario presupuesto para los festejos del Bicentenario de la Independencia y Centenario de la Revolución, sino de la propia administración de Los Pinos, una especie de Afore que disfrutará con su pareja al terminar el sexenio).

Tomando como base las cifras de sus propias declaraciones patrimoniales que Nava aceptó hacer públicas, particularmente la correspondiente a 2007, y los tabuladores de los cargos que ha ocupado, es posible presumir que la compra del departamento en Polanco --que se ha ido poblando de nuevos ricos como él-- es un asunto de corrupción.

En efecto, en sólo cuatro años, Nava pasó de la inopia a la prosperidad, que se inició con la fraudulenta elección de 2006.

En agosto de ese año, cuando ni siquiera el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) había decidido que Calderón era el sucesor de Vicente Fox, Nava vio venir la fortuna y obtuvo un crédito hipotecario por 3 millones 100 mil pesos, que sumó a un “préstamo personal” por un millón de pesos para la compra de una casa.

Es decir, comenzó el 2007 con una deuda de 4 millones 100 mil pesos, sin contar otros adeudos, como las tarjetas de crédito.

Respecto a sus ingresos, el puesto de secretario particular de Calderón era nivel HC2, equivalente a subsecretario de Estado, por lo que su sueldo bruto ascendía a 203 mil 564 pesos y, ya sin impuestos, a 143 mil 314. Durante todo el 2007, percibió en total un millón 719 mil 768 pesos.

Al año siguiente, 2008, Nava sólo cobró un millón 576 mil 454, porque en noviembre de 2008 Calderón lo despidió. En todo caso, en los casi dos años que estuvo en el gobierno pudo ahorrar, sin gastar absolutamente nada, un total de 3 millones 296 mil 222 pesos.


Después, durante diez meses, Nava no trabajó en nada y, en teoría, tampoco tuvo ingresos: De noviembre 2008, cuando fue separado de la secretaría particular por Calderón, a agosto de 2009, cuando comenzó su gestión como presidente del PAN --en sustitución de Germán Martínez, quien hace dinero como gestor o coyote--, sólo hizo campaña como candidato a diputado federal.

En todo caso, Nava sólo cobró un mes de sueldo como presidente del PAN, el de agosto de 2009, porque aseguró que renunciaba a él y su ingreso sólo sería su dieta como diputado federal. Por ese mes cobró, según el tabulador de ese partido, 130 mil 352 pesos con 65 centavos netos.

Como diputado federal, Nava percibe un promedio de 100 mil pesos mensuales, que multiplicados por los 12 meses que lleva como tal, suman un millón 200 mil pesos.

De esta manera, si se suman todos esos ingresos de Nava, de enero de 2007 a septiembre de 2009, el resultado es el siguiente: Cuatro millones 626 mil 574 pesos, apenas medio millón de más al adeudo que tenía cuando comenzó el gobierno de Calderón.

Y hay que insistir: Se trata de una cantidad acumulada sólo en el caso de que Nava no haya gastado absolutamente en nada, ni siquiera en la pensión que, al parecer, destina a los tres hijos que tuvo con María Covadonga Baños Ardavín.

Los números de Nava, en suma, sacan a flote un caso de enriquecimiento inexplicable, un asunto de corrupción.

El tema da para más…

¿Vale la pena ingresar a cónclaves secretas y tomar juramentos de lealtad para someterse voluntariamente de por vida a las órdenes de gente como ésta, cuya ralea está decididamente comprobada? ¿Vale la pena ingresar en una de las sociedades secretas prohijadas por la ultraderecha cuya capital nacional está en estos momentos en la ciudad de Guadalajara, Jalisco, sólo para hacer más ricos y darle más poder a los amorales vivales que escondiendo su hipocresía tras crucifijos y Biblias viven la vida en grande sin darle más que miserables migajas a sus “tropas de base”? Desde luego que no. Y menos si los beneficiarios son unos verdaderos hampones dispuestos a todo como el hoy extinto Gran Capo de la UAG Antonio Leaño Alvarez del Castillo y como el juramentado Yunquista César Nava.

Naturalmente, no sólo son los “soldados” de la extrema derecha radical de México los que han buscado beneficiarse a manos llenas con el cuerno de la abundancia que para ellos representa México al cual creen que pueden saquear a su antojo al igual que como lo hacían los políticos de antaño a los cuales los Yunquistas y Tecos aspirantes a sucederlos habían jurado que los iban a encarcelar y desterrar en cuanto la derecha llegara al poder para implementar su “cambio”. Los panistas que les hacen dupla tienen su propio árbol de la vida que sienten que les dá derecho para meter su mano en donde antes les daba tanto coraje que sólo los políticos del hegemónico Partido Revolucionario Institucional podían meter las suyas:





Precisamente para esto les era muy importante a los panistas y a los Yunquistas y a los Tecos que el PAN se sostuviera en la Presidencia de la República otro sexenio como la realidad de una nueva monarquía política disfrazada de democracia recurriendo inclusive a artes chuecas para lograr estos objetivos, “ganando”, como lo dijera el mismo Felipe Calderón, haiga sido como haiga sido:




Título: Haiga sido como haiga sido
Cartonista: Rocha
Fuente: Revista PROCESO


-------------------------


POST SCRIPTUM:


Como una muestra de la enorme corrupción que comparten los panistas con Yunquistas de relieve como el líder nacional del PAN César Nava, a continuación se muestran los planos de una residencia multimillonaria propiedad de cierto funcionario público que “olvidó” manifestarla en su declaración patrimonial de bienes y de la cual sólo se supo cuando bajo los influjos del alcohol abrió la boca de más y se le descubrió lo que estaba ocultando:





La casa, con un valor estimado en cinco millones de pesos, está ubicada en Ayapango, en el Estado de México. La siguiente nota dá más pormenores al respecto:

La lujosa cabañita de Felipe Calderón
Revista PROCESO Num. 1775
12 de noviembre del 2010

El presidente Felipe Calderón y su esposa, Margarita Zavala, no pudieron seguir ocultando más tiempo información relacionada con sus propiedades, concretamente de sus terrenos y casas en la Ciudad de México y en Ayapango, Estado de México. A raíz de una investigación de Proceso sobre los bienes no declarados de la pareja presidencial, el mandatario se sintió obligado a divulgar por internet una parte de los faltantes. Además, un comentario público de Calderón ante empresarios permitió confirmar la existencia de su “cabañita” de Ayapango, como él la llama. El caso es que conforme pasan los años del sexenio sus propiedades y la de su esposa siguen creciendo y creciendo…

AYAPANGO, MÉX.- El pasado 29 de septiembre, en una comida con empresarios, Felipe Calderón admitió que es dueño de una “cabañita”. El mandatario se refirió así a lo que en realidad es un lujoso chalet de 255 metros cuadrados construido en un terreno de poco más de cuatro hectáreas comprado por él y su esposa, Margarita Zavala, en este municipio, ubicado al pie de los volcanes Popocatépetl e Iztaccíhuatl.

Desde hace aproximadamente 15 años los Zavala Gómez del Campo –suegros de Calderón– echaron raíces en este pueblo, donde han comprado varios predios. Pero pocos de los habitantes de esta comunidad mexiquense saben que, de manera discreta, esa familia y Felipe Calderón han ido aumentando el tamaño de sus parcelas hasta alcanzar una extensión de más de 41 mil metros cuadrados.

Ambas familias compran las tierras a precio de ganga: entre 2.76 y 10.41 pesos el metro cuadrado, pero datos del ayuntamiento de Ayapango indican que los predios rurales se cotizan en 65 pesos por metro cuadrado en promedio.

En cuatro declaraciones patrimoniales –las de 2007, 2008, 2009 y 2010– Calderón no reportó la compra de los terrenos ni la construcción de la “cabañita”; 70% de éstos se hallan a nombre de Margarita, y el resto al de su esposo.

Una casa creciente

El marzo último, Proceso (número 1741) reveló las inconsistencias en las declaraciones patrimoniales de Calderón: durante los cuatro años referidos no reportó varios bienes inmuebles adquiridos en la Ciudad de México escriturados a nombre de Margarita Zavala. De esta manera, las inversiones de la pareja crecieron hasta 11 veces respecto a lo que tenía antes de mudarse a Los Pinos.

Vista desde el exterior, la vieja casa familiar del número 8 de Privada de Cóndor 231, en la colonia Las Águilas, es la misma desde que Calderón era precandidato. Pero puertas adentro se revelan nuevas propiedades: una alberca, una cabaña, un amplio jardín y otra casa –de 234 metros cuadrados– marcada con el número 9 de esa calle.

Pero eso no es todo. La familia tiene otra propiedad, de tres pisos, en el número 227 de la misma privada, con media cancha de baloncesto, una pequeña bodega y estacionamiento para tres o cuatro autos. Todos estos predios están interconectados.

Si a esto no se le puede llamar corrupción ejercida desde la misma Presidencia de la República por el hombre que quería ganar haiga sido como haiga sido, habrá que inventar una nueva palabra para describir este fenómeno.

Cuando el Yunque se sentía con tanta fuerza como para tener posicionado a uno de los suyos en la presidencia nacional del partido gobernante a través de Felipe Calderón, la estrategia Yunquista se centró en concertar alianzas electorales en el 2010 con la misma izquierda a la cual le robó descaradamente la Presidencia de la República en las desaseadas elecciones presidenciales del 2006, esto porque para el 2012 el PAN-Gobierno ya no ve a la izquierda como “todo un peligro para México” sino al otrora hegemónico Partido Revolucionario Institucional que amenaza con expulsarlo de una silla presidencial que la dupla derecha-ultraderecha no tiene intenciones de soltar ni ahora ni nunca porque estos tipos en realidad nunca creyeron en la alternancia si no era para beneficiarse ellos mismos. Hoy el PRI es el que es “todo un peligro para México”, y así fue a decirlo el mismo Felipe Calderón ante un evento masivo celebrado en el Partido Acción Nacional con motivo de los 10 años de desgobierno del PAN-Yunque en el poder. Como resultado de esas alianzas concertadas por el Yunquista César Nava con un envilecido Partido de la Revolución Democrática encabezado por un todavía más envilecido Jesús Ortega, entre el PAN y el PRD cocinaron un candidato común para el Estado de Sinaloa, precisamente el Estado que sirve de plataforma para uno de los narcotraficantes más poderosos del mundo que se ha beneficiado con el arribo del PAN al poder en el 2000 empezando por su facilísima salida del penal en el que estaba recluído hasta la atomización de casi todos sus opositores en una guerra de legitimación en la cual Felipe Calderón se encargó de irle quitando fuerza a los enemigos del “Chapo” Guzmán excepto al mismo “Chapo” Guzmán permitiéndole irse apoderando del territorio nacional. Esto fue denunciado en su momento por importantes agencias noticiosas internacionales como la National Public Radio que abrió los resultados de sus investigaciones el 18 de mayo del 2010 en un bien documentado reportaje al cual se le dió riguroso seguimiento el día siguiente. (Cualquier mal pensado diría que la “solución final” propuesta a Felipe Calderón por los ultraderechistas que lo rodean a la desgastante guerra de legitimación iniciada por el mismo Calderón consiste en unir fuerzas con el Chapo para convertir al Cártel de Sinaloa en un super-cártel con la finalidad de que los enfrentamientos entre los cárteles y las bajas civiles terminen justo para cuando arranque la sucesión presidencial en el 2012. Y al menos la firma de inteligencia Stratfor en su reporte anual denominado “Mexican drug wars: Bloodiest year to date” (Las guerras mexicanas de drogas: El año más sangriento a la fecha) anticipa la consolidación de ese uper-cártel cuya plataforma de operaciones está asentada en el Estado de Sinaloa.) El candidato lanzado por la aberrante dupla ultraderecha-izquierda PAN-PRD fue Mario López Valdez, alias Malova, usándose como tema de campaña la acusación de que el partido gobernante, el PRI, le había facilitado al “Chapo” Guzmán su ascenso, siendo que los mejores tiempos del “Chapo” llegaron precisamente cuando el PAN ascendió a la Presidencia de la República. Y fue postulado con la promesa solemne, casi sagrada, de que Malova se encargaría de limpiar totalmente a Sinaloa con la ayuda del PAN-Gobierno de cualquier vestigio de narcotraficantes y narcotráfico, en síntesis, acabar de una vez por todas y para siempre con el imperio del Chapo Guzmán en Sinaloa.

En su toma de protesta, el ungido del PAN-Yunque-PRD Malova ofreció devolverle la tranquilidad a Sinaloa, pidió a los integrantes de su gabinete honestidad y demostrar trabajo en los próximos seis años, y les advirtió que quien no cumpla se va, insistiendo en que no toleraría corruptelas, componendas, prepotencia, ni impunidad en los miembros de su administración, agregando “Se acabaron los nuevos ricos y el derroche costeado por los ciudadano”.

Lo que dijo Malova suena demasiado bueno como para ser verdad, si hemos de hacerle caso al adagio popular que dice que si algo suena demasiado bueno como para ser verdad, muy posiblemente no lo sea.

No hubo de pasar mucho tiempo para que el ungido de la alianza estrambótica PAN-PRD mostrara su verdadera cara, ni siquiera un mes desde el día en el que tomó posesión, como lo confirma la siguiente nota:

Cuñado de narcotraficante llega al poder
Staff
Agencia Reforma
7 de enero del 2011

El gobernador Mario López Valdez (Malova) designó ayer subsecretario de Agricultura a Óscar Félix Ochoa, cuñado de Javier Torres Félix, “El JT”, extraditado a Estados Unidos por narcotráfico y quien fuera brazo derecho de Ismael “El Mayo” Zambada.

Además, tres hermanos de Félix Ochoa fueron detenidos por el Ejército, en Culiacán, el 11 de julio de 2008 con 18 kilos de cocaína, 28 mil dólares, cuatro vehículos y un arma. El secretario de Agricultura estatal, Juan Nicasio Guerra, dijo que él y el gobernador hicieron el nombramiento.

Por su parte, López Valdez aseguró que la designación se hizo para cumplir una promesa con los agricultores del Valle de San Lorenzo. “Cuando andábamos perfilando nuestra candidatura de la coalición, nosotros queríamos traernos a Jesús Patrón y su grupo (al que pertenece Félix Ochoa).

“Hicimos algunas negociaciones para que el Ssecretario (de Agricultura) fuera Juan Guerra, porque le corresponde al PRD, y cuando no dimos la Secretaría, tuvimos que dar a ese grupo (de Jesús Patrón) una subsecretaría, que en este caso el grupo escogió a Óscar Félix para que fuera el responsable de esa área”.

Si alguien estuvo celebrando el triunfo del candidato de la izquierda emPANizada seguramente ese debió de haber sido el “Chapo” Guzmán. Y si alguien tiene razones para empezar a preocuparse son los habitantes del Estado de Sinaloa, que se dejaron embobar por las luminosas promesas con las que la ultraderecha salpica la propaganda electoral. Muy tarde empezaron a descubrir los sinaloenses lo mismo que lo que muy tarde descubrieron los habitantes del sufrido Estado de Jalisco en donde la ultraderecha se está enraizando firmemente en todos los estratos del gobierno y de la sociedad sin intenciones de aflojar su yugo.

Conforme transcurre el tiempo, son tantas las evidencias que van aflorando sobre la corrupción moral absoluta que distingue a los ultraconservadores mexicanos líderes de la derecha ultra que documentar sus pecados es algo que se llevaría una gran cantidad de libros que tendrían que terminar conformando una verdadera enciclopedia. Como muestra de la inmoralidad prevaleciente entre estos descastados, tenemos el siguiente ejemplo de uno de los que presumían ser uno de los más puros e inmaculados moralistas de la liga Yunquista de la decencia en México (se trata del mismo tipo que desvió fondos públicos que le fueron dados por el corrupto ultraderechista Luis Pazos para usarlos en la compra de tangas eróticas con las cuales podía dar satisfacción a sus pequeñas perversiones privadas):

Ordenan arresto de Serrano Limón por peculado
Agencia REFORMA
31 de enero del 2011

Jorge Serrano Limón está entre la espada y la pared.

Un juzgado federal dictó auto de formal prisión contra el dirigente del Comité Nacional Provida, por su presunta responsabilidad en el peculado de 2 millones 607 mil pesos.

De acuerdo con la causa penal 156/2010, el juez 12 de Distrito de Procesos Penales Federales con sede en el Distrito Federal, Jesús Terríquez Basulto, ordenó la aprehensión el 13 de diciembre pasado al considerar que existen los elementos suficientes para enjuiciar a Serrano Limón.

Debido a que el dirigente de Provida se encuentra en libertad, ya que promovió un juicio de amparo que está pendiente de resolución, el juez ordenó a la Procuraduría General de Justicia del DF que elabore su ficha.

En junio de 2005, Nacional Financiera, fiduciaria de la Lotería Nacional, presentó una denuncia ante la PGR contra el dirigente debido a que desvió parte de los recursos que se le habían entregado para comprar equipos de ultrasonido y ecosonido.

En el juicio, en el que está como coadyuvante Nacional Financiera, esta dependencia está representada por los abogados Emilio Mateos Gutiérrez y José Javier Peña Lucido.

Serrano recibió 3 millones 495 mil pesos para que fueran utilizados única y exclusivamente en el equipamiento de 9 centros de atención a la mujer administrados por Provida.

Una auditoría concluyó que la empresa Imporvar, a quien le compró supuestamente los equipos, entregó facturas falsas, además de que los propietarios de esa compañía trabajaban en Provida.

No es la primera ocasión en que Serrano Limón está en problemas.

En abril de 2005, fue multado con 13 millones 237 mil pesos e inhabilitado durante 15 años para ocupar cargos públicos por el mal uso de 30 millones de pesos del programa de Apoyo a Mujeres.

El lema adoptado por Felipe Calderón en su infausto sexenio fue “Vivir Mejor”. ¡Y hablaba en serio! Sólo que el lema no dió los detalles de aquellos a los cuales se estaba refiriendo el Señor Presidente:

El PAN en el poder paga bien y produce nuevos ricos
Álvaro Delgado
Revista PROCESO # 1859
17 de junio del 2012

Algunos de los más cercanos colaboradores de Felipe Calderón, miembros destacados del PAN, se cansaron de ser clasemedieros y decidieron aprovechar el sexenio para acrecentar sus patrimonios personales, en particular el inmobiliario. Sigilosamente empezaron a mudarse a casas más amplias, más confortables y con muchos más metros cuadrados de construcción, en zonas habitacionales de lujo de la Ciudad de México, como San Ángel Inn, Bosques de las Lomas, Polanco, El Pedregal de San Ángel… Tienen un modelo a seguir: Germán Martínez, exsecretario de Estado, exdiputado, expresidente nacional de su partido y actual litigante de un bufete jurídico, vive en una residencia de más de 700 metros que tuvo un costo de más de 16 millones de pesos.

Fabricante de pobres en su sexenio, Felipe Calderón es también productor de nuevos ricos del Partido Acción Nacional (PAN).

La fortuna de los miembros de esta camada es un enigma, negado a la transparencia, pero un rasgo es su prosperidad inmobiliaria: de inquilinos en barrios clasemedieros, se mudaron a zonas de lujo como Bosques de Las Lomas, Polanco, San Ángel y El Pedregal.

Cambiaron, literalmente, de Código Postal.

El prototipo de estos nuevos ricos al amparo del poder es Germán Martínez Cázares, ex presidente del PAN. Al inicio del sexenio no tenía casa propia y ahora vive en una residencia que compró en 16 millones 200 mil pesos, en la mejor zona de San Ángel Inn.

Nadie sabe si salario corresponde con patrimonio de colaboradores

La casita de Martínez Cázares, quien renunció a la presidencia del PAN en 2009 tras la peor derrota electoral en la historia del partido, mide 743 metros cuadrados y se la vendió, en mayo de 2010, Carla María Compeán Woodworth, hija del presidente de la Federación Mexicana de Futbol (FMF), Justino Compeán.

Consejero de la candidata Josefina Vázquez Mota y director de la Escuela de Derecho de la Universidad La Salle, su alma máter, Martínez Cázares litiga a través de un bufete jurídico, con lujosas oficinas en Coyoacán, entre cuyos socios fundadores se encuentra Roberto Gil Zuarth.

Gil Zuarth, coordinador de la campaña de Vázquez Mota, es otro de los prominentes panistas que ascendieron vertiginosamente en el sexenio de Calderón, de quien fue secretario particular. De residir en un modesto departamento en Tlalpan y no poseer ni auto, compró en julio de 2007 una casa en San Ángel Inn por 4 millones de pesos.

Otros subordinados de Calderón –cuya bonanza inmobiliaria y la de su mujer ha documentado Proceso– se han mudado de domicilio a partir de formar parte de la alta burocracia federal y de cargos legislativos por su militancia en el PAN.

Maximiliano Cortázar Lara, amigo de Calderón y de Margarita Zavala desde hace dos décadas, vivió en casa ajena toda su vida en Las Águilas, pero en mayo de 2009 se mudó a una residencia de mil 312 metros cuadrados en Jardines del Pedregal. El costo: 7 millones 430 mil pesos.

El futuro diputado federal es propietario también de la empresa MXC Consultores, dedicada al análisis de medios, redes sociales, campañas políticas, producción y marketing.

La sustituta de Cortázar en la Coordinación de Comunicación Social de la Presidencia de la República, Alejandra Sota Mirafuentes, también ascendió: vivía en un departamento de la Del Valle y, en 2008, compró una mansión de 660 metros cuadrados en Bosques de las Lomas, una de las áreas residenciales más lujosas de la Ciudad de México. El precio: 6 millones 700 mil pesos.

César Nava Vázquez, sustituto de Martínez Cázares en el PAN, es otro integrante del grupo de Calderón que, de no poseer domicilio particular, alterna ahora su residencia entre un departamento de Polanco, que le costó 7 millones 250 mil pesos, y una casa en San Antonio, Texas.

Tras las elecciones de 2006 Nava había comprado una casa en la colonia Florida, contigua a la del priista Manlio Fabio Beltrones. Le costó 6 millones 730 mil pesos, con una hipoteca por 3 millones 100 mil pesos.

Justamente uno de los amigos de Nava desde la Universidad Panamericana, a quien hizo director jurídico del PAN y representante ante el Instituto Federal Electoral (IFE), Guillermo Bustamante Ruisánchez, forma parte de los nuevos ricos.

De vivir en la casa paterna, en Santa María la Ribera, Bustamante adquirió, en febrero de 2007, una casa de 850 metros cuadrados en Bosques de Las Lomas, igual que Alejandra Sota, y a un precio casi idéntico a la de ésta: 6 millones de pesos.

Otros nuevos ricos al amparo del poder panista son Mariana Gómez del Campo, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, y Rogelio Carbajal Tejada, representante del PAN ante el IFE.

Todos estos nuevos ricos, además de panistas y amigos de Calderón, tienen algo en común: al inicio del sexenio hicieron público su patrimonio, pero luego le echaron cerrojo a toda información sobre su fortuna.

Nadie sabe, salvo ellos y la Secretaría de la Función Pública, si su patrimonio se corresponde con los emolumentos que devengan.

Los socios Martínez y Gil Zuarth

Cuando el Tribunal Electoral del Poder Judicial de la Federación (TEPJF) decidió que Calderón había ganado las elecciones, en septiembre de 2006, el equipo de éste comenzó a gozar del presupuesto destinado al equipo de transición: 150 millones de pesos.

Para esa fecha, la condición económica del grupo de Calderón era raquítica, conforme a sus declaraciones patrimoniales, que en poco tiempo dieron un vuelco.

Germán Martínez, que había sido diputado federal los tres años anteriores, declaró no tener casa ni vehículos propios. Era dueño sólo de un óleo con valor de 250 mil pesos, tres plumas y un reloj que costaban en conjunto 3 mil pesos y menaje de casa que calculaba en un millón.

Según su declaración, al 6 de noviembre de 2006 tenía en el banco una inversión por 750 mil pesos, pero debía en tarjetas de crédito mil 500 dólares y 40 mil pesos mexicanos. Nada más.

Casi un mes después, en su declaración inicial como secretario de la Función Pública –el 19 de diciembre–, la fortuna comenzó a estar de su lado: se compró una casa con valor de 2 millones 665 mil pesos con un crédito que obtuvo a dos semanas de tomar posesión del cargo.

Pese al crédito hipotecario, que ascendió a 2 millones 132 mil pesos, Martínez declaró que seguía teniendo 750 mil pesos en el banco y agregó otros 50 mil.

Para cuando concluyó su breve gestión como servidor público para buscar la presidencia del PAN, en octubre de 2007, Martínez ya se había comprado un automóvil Honda del año, tenía cuentas bancarias por 250 mil pesos y contaba con un seguro de retiro de 424 mil pesos.

Martínez presidió el PAN apenas un año y nueve meses, de diciembre de 2007 a agosto de 2009, lapso en el que cobró un sueldo mensual de 128 mil pesos netos, según información oficial.

Pero nueve meses después de dejar el cargo –tras la peor debacle electoral del partido, que contrajo una deuda de más de 300 millones de pesos–, Martínez estrenó casa: la que le compró a Compeán Woodworth en San Ángel Inn, un barrio de alta plusvalía.

Consta en el Registro Público de la Propiedad (RPP) que la operación se realizó el 26 de mayo de 2010. Se trata de una propiedad de 743 metros cuadrados de terreno, sobre el que se edificaron dos plantas y cuenta con sótano y cuarto para el chofer. El costo: 16 millones 200 mil pesos.

A diferencia de otras operaciones de compraventa, el documento no consigna si se realizó mediante un crédito hipotecario o de contado.

Después de su salida del PAN, en medio de acusaciones de inepto pese a disponer de 600 millones de pesos para la operación electoral, Martínez Cázares comenzó a litigar en un despacho llamado FGZ Consultores, ubicado en la calle de Londres 345, en Coyoacán.

Formalmente, Germán Martínez no pertenece a la sociedad denominada Snash, S.C., constituida el 14 de abril de 2009, justo cuando estaba en curso la campaña federal, sino sólo los cuatro socios fundadores: Roberto Gil Zuarth, Miguel Novoa Gómez, Carlos Alberto Lezama Fernández del Campo y Emilio Suárez Licona.

El capital social fue de 4 mil pesos, a razón de mil pesos cada uno, hasta que, el 15 de marzo de 2010, Gil Zuarth hizo “la donación gratuita de la parte social de la que es titular” a los otros tres socios.

Aunque Germán Martínez no aparece en el acta constitutiva de la sociedad, él es el que maneja el despacho y ahí tiene su oficina. Su secretaria se llama Verónica Cortés.

–¿También es ahí Snash, S.C.? –le preguntó el reportero.

–Sí, también.

Los socios de Germán Martínez lo han acompañado en su más reciente trayectoria: Novoa Gómez fue su secretario particular en la SFP y luego en el PAN, mientras que Suárez Licona fue director de Servicios Parlamentarios de la Cámara de Diputados.

El caso de Lezama es peculiar. Apoderado del PAN cuando Martínez lo presidía, en mayo de 2007 se casó con Maricarmen Valls Esponda, hija de Sergio Valls, ministro de la Suprema Corte de Justicia de la Nación.

A la boda, en Cuernavaca, celebrada por el obispo Onésimo Cepeda, asistieron, entre otros, el exmandatario Carlos Salinas de Gortari, el litigante Diego Fernández de Cevallos y el entonces gobernador del Estado de México, Enrique Peña Nieto.

Otros invitados a la boda fueron el ministro Mariano Azuela, el abogado Juan Collado, el entonces procurador Eduardo Medina Mora y el dueño de la cadena de “soles”, Mario Vázquez Raña.

La esposa de Lezama es diputada federal del PAN en funciones por ser suplente de Gil Zuarth; y el hermano de ella, Jaime, fue priista y alcalde del PRD, pero actualmente es rector de la Universidad Autónoma de Chiapas.

Otros agraciados

“Muchos panistas se han convertido en gestores de dinero y programas públicos”, escribió Germán Martínez en Reforma, el 11 de julio del año pasado, al hacer un diagnóstico que concluyó que “El PAN está enfermo”, como encabezó su artículo.

Él mismo, sin embargo, es objeto de señalamientos en este sentido al interior del PAN, aunque no ha habido aún acusaciones directas de quien es motejado como “Adela Micha: pide la micha (mitad) por adela (adelantado)”.

En noviembre de 2010, cuando aspiraba a presidir el PAN y fue vencido por Gustavo Madero, Gil Zuarth exaltó su amistad con Martínez y repudió el tráfico de influencias. “Es una actividad irregular”, dijo.

–¿A eso se dedica Martínez?

“Yo sé que Germán Martínez es un abogado que ejerce su actividad. Estoy cierto de que Germán tiene un despacho de abogados y se dedica al ejercicio libre de su profesión”.

–¿Está asociado con él?

“No tengo ningún vínculo de negocios con Germán Martínez”.

A sus 35 años de edad, Gil Zuarth ha tenido un vertiginoso ascenso político y económico en el sexenio: coordinador de asesores de Germán Martínez en la SFP, abogado general del PAN y representante ante el IFE, diputado federal plurinominal, subsecretario de Gobernación, candidato a presidente de su partido, secretario particular de Calderón y coordinador de la campaña de Josefina Vázquez Mota.

Hace cuatro años, Gil Zuarth no tenía coche, poseía un modesto departamento de cien metros cuadrados y era deudor de dos tarjetas de crédito, pero poco después de 2006 compró una camioneta Volvo de 650 mil pesos y una casa de 4 millones en el barrio de lujo de San Ángel Inn, aunque ha vivido también en el Club de Gol México y el Pedregal de San Ángel.

“Yo vivo bien, he tenido un sueldo muy honorable en estos últimos años, con el presidente Calderón, en efecto –dijo Gil al reportero–. ¡No tengo ninguno de los tres pecados capitales de la política: no soy corrupto, no soy tonto y no soy flojo! ¡Le pese a quien le pese! Y precisamente porque son mis fortalezas las voy a hacer públicas y evidentes.”

En la camada de nuevos ricos que representa Gil Zuarth –cuya esposa es Carla Astrid Humphrey Jordán, consejera del Instituto Electoral del Distrito Federal (IEDF)– se inscriben también otros personajes del grupo de Calderón que se han avecindado igualmente en el rumbo de San Ángel.

De hecho, en Reyna, la calle donde vive Germán Martínez, compró una casa en 2008 Rogelio Carbajal Tejada, exsubsecretario de la Función Pública y representante del PAN ante el IFE.

Es una propiedad de 339 metros cuadrados y le costó 3 millones 900 mil pesos, según el notario Manuel Gómez del Campo López, padre de la diputada local y candidata a senadora Mariana Gómez del Campo.

Justamente ésta vive, también, por el rumbo: En Lomas de San Ángel Inn, en la avenida al Desierto de los Leones, la legisladora compró en 2009 un departamento de 143 metros cuadrados. Le costó 2 millones de pesos, además de los 100 mil pesos de un cajón de estacionamiento.

Mariana, coordinadora de la campaña de Vázquez Mota en el Distrito Federal, es hermana de José Manuel Gómez del Campo Gurza, a quien Peña Nieto le regaló una notaría dos días antes de dejar el cargo de gobernador.

Más aún: Mariana y José Manuel son primos de Virginia Gómez del Campo, esposa de Luis Videgaray Caso, coordinador de la campaña presidencial de Peña Nieto...

Amigo íntimo de Mariana, César Nava prefirió vivir en Polanco, luego de que compró un departamento que generó escándalo junto con su nueva esposa, Patricia Sirvent Barton, cuyo nombre en la farándula es Patilú.

Como consta en los documentos del RPP, Fundición Residencial, S.A. de C.V., representado por José Bromberg Alterowicz, les vendió la propiedad a Nava y Sirvent por 7 millones 250 mil pesos en agosto de 2010.

El departamento, de 335 metros cuadrados, está en la calle Rubén Darío y tiene una vista espectacular al Bosque de Chapultepec.